miércoles, 3 de noviembre de 2021

 

Yola, no te vas… 

 

Hoy día de Muertos fuimos a donde Zenón nuestro compadre a pagar nuestros respetos por nuestra querida Yola, su esposa. No quisimos ir al tradicional desayuno de "higaditos", ni al mole en la comida como todos los años. Sólo queríamos acompañar a nuestro amigo de toda la vida en Oaxaca, perdió este año a su hijo, otro hermano y ahora a su esposa. Ángeles y yo estuvimos todo el resto del día afectados por el pesar, fue un encuentro muy humano y profundo. No podíamos creer que Yola ya no estuviera, era el alma de la familia y compañera de muchas vicisitudes en nuestra familia. 

 

    -Ya váyase- le dijo Yola a su suegro moribundo, - ya descanse. 

 

Así era Yola, derecha y mal hablada. Cuando entró de novia a la casa de los suegros según la costumbre de Tlacolula, vio cómo don Albino golpeaba a su mujer y un día se animó a encararlo:  

 

    -Si yo fuera su mujer y Ud.me pegara le devolvía el guantón… 

    -   ¡Ah bruta¡ - atinó a responder el sorprendido suegro. 

 

Eran tiempos de pobreza cuando íbamos juntas las familias a acampar a las deshabitadas playas de Huatulco, acampábamos en tiendas de lona, Yola llevaba anafre, carbón, tlayudas, huevos y a todos nos daba desayunar. Un buen día los hijos pidieron desayunar en restaurante, cada uno pidió diferente y no se lo acabaron. Yola estalló: 

 

    - Se comen todo lo que pidieron o se los meto por lavativa… 

 

Nuestra amistad comenzó con los Ramírez al mismo año que llegamos a Oaxaca en 1973. Al año siguiente nos casamos Ángeles y yo, e igual de espartana fue la boda civil a la que vinieron familiares y amigos de México. La ceremonia fue en la entrada del departamento de los Winter, un espacio encementado de apenas unos metros cuadrados, pero suficiente para       que un famoso trio de viejitos animara el baile. Había sí mucho chupe y Sabritas para acompañar. Yola se dio cuenta que esa boda de antropólogos pobres no iba y mandó traer un canasto grande con tamales. Ese fue el banquete. 

Un tiempo después, vino el matrimonio eclesiástico en la ciudad de México, en casa de los Hinojosa, aprovechando viaje en la misma ceremonia se bautizó Gabriel y el padrino fue Zenón. Para esa ocasión Yola llevó el ceremonial ciro que hacían en Tlacolula, una enorme y gruesa vela adornada con flores y frutas, quién sabe cómo resistió el viaje entre las piernas hasta México. 

Tiempo después, me abrieron el esternón para cambiar tubería, eso fue allá por el Pedregal, me dieron de alta pero tenía que pasar unos días en hotel antes de regresar a Oaxaca. La sorpresa fue que tocaron a la puerta y ahí estaba Zenón y Yola con una botellota de mezcal. Sabían dónde me operarían, pero ya no me hallaron, quién sabe cómo estuvieron preguntando a los taxis del hospital hasta que dieron con el hotel en la Av. Álvaro Obregón.  

Gabriel se graduó en el Tec de Monterey, y allá quisieron ir los compadres a celebrar al ahijado, los dos estrenando trajes de noche. 

Los Ramírez decidieron irse a vivir a San Xabier, atrás de Monte Albán donde compraron terrenos con mucha agua y en donde cada hijo tiene su casa. Volvieron a ser “campesinos después de citadinos”, decía Zenón y, sí el jardín y la huerta están siempre floreando y dando frutos. Espacio suficiente para acomodar cada semana a la creciente familia, y en Muertos para dar de comer a más de 100. Días antes del 1 de noviembre no fallaba la invitación extendida a amigos nuestros de visita, algunos se acostumbraron y venían cada año de México al mole que preparaba Yola con días de anticipación, no faltaban los Hinojosa, Vaquera, Aguilar, Arrieta, Rosalino y familia, Luz María Esparza, mis muy cercanos Dillon- Esparza y cuanto colega andaba de paso. 

 

    -Ay compadre te quiero mucho – me dijo un día después de estar recordando tanta cosa vivida durante años. 

    -Yola, qué va a decir Zenón… la bromeé 

    -Compadre que no le llega a la comadre a las caderas, no es compadre de a deveras...-soltó con ruidosas carcajadas. 


Esa iba a ser la marca de la casa: risas estruendosas. 

Empezaron los velorios y en el antiguo garaje convertido en salón de usos múltiples y capilla ardiente se velaban a los que iban muriendo especialmente doña María la madre de Zenón, luego Benito primero de los dos hermanos muertos de Zenón.  

 

      - Entre carcajadas y llantos así celebramos a nuestros muertos, -dijo Edith. 

 

Esta mañana que fuimos a acompañar a Zenón preguntamos dónde iban a depositar las cenizas de Yola, 

                         -No te acuerdas- respondió Zenón-, lo que dijimos una vez, que ella quería estar con su mamá, y yo también con la mía cuando la muerte nos separe y, ahora sí, -dijo Yola- cada quien a chingar a su madre…  

Esa era Yola, y tan presente que basta verla en el altar familiar diciéndonos:

                   

                      - No me digan que me vaya ya… 

 

esparzacamargo@hotmail.com

   

 

 

 

 

 

viernes, 8 de octubre de 2021

 

                                        El IEEPO para principiantes

                 (Entrevista con el Antrop. Dr. Benjamín Maldonado de la UNAM,30 de julio, 2021) 

 

Manuel Esparza:  Benjamín cuando estuviste en el sindicato del IEEPO… 

BM. -No, perdón, no fui del sindicato, porque nunca tuve base, sino que era de contrato, lo cual es estar en condiciones muy precarias. Primero estuve en el Fondo Editorial del IEEPO del 2003 al 2012, que pertenecía a la Unidad de Proyectos Educativos. Después estuve en la Unidad de Formación Continua de la Dirección de Evaluación un año, del 2015 al 2016. En el  primer periodo, la relación con el sindicato era muy rara, porque como  trabajador del IEEPO no tenía yo relación con él, pero como colaborador de la Sección 22 entonces sí, porque yo trabajaba con maestros de Educación Indígena y de otros niveles educativos dando pláticas, talleres, cursos de por fuera, no era parte del trabajo del IEEPO, sino  nada más por compromiso personal; entonces tenía yo una buena relación con los  maestros sindicalizados,  con sus distintas  áreas, incluso  formando parte de las organizaciones en las que participaban ellos como la Asamblea Estatal Democrática del Pueblo de Oaxaca y los foros de análisis de la realidad india, negra y popular. 

La relación con el sindicato fue buena durante el período cuando estuve en el Fondo Editorial. Al principio, muy bien, los libros míos que publicaba el IEEPO los utilizaban mucho, incluso en el CEDES (Centro de Estudios y Desarrollo Educativo) de la Sección 22, pero no después, cuando estuve en la Dirección de Evaluación, porque ésta era considerada punitiva, entonces me identificaron como traidor y no sé qué más, hasta creo que en alguna asamblea hubo algún pronunciamiento de que yo no era una persona con la que debían de tener relación. Eso causó que muchos maestros que me conocían, incluso maestros indígenas, dejaran de participar en lo que yo convocaba.  

M. -Y eso, ¿de dónde venían los ataques, ¿quiénes eran? 

BM.-Era gente que estaba en puestos claves de  la dirigencia del sindicato, por ejemplo,  que yo supiera, eran  como los segundos de Educación Indígena del sindicato, todo comenzó porque  no sabían que yo estaba  en la Dirección de Evaluación, entonces mandaron gente  a ver qué estaba pasando, y fue cuando se empezaron a hacer cursos para prepararlos para hacer la evaluación, yo no daba los cursos, pero si  estaba presente, y entonces se me acercaron varios y me preguntaron qué si les aconsejaba participar en la evaluación, les dije que sí,  pero, decían que eso punitivo, era una acción del gobierno. Exactamente, les respondía, precisamente por eso, porque si lo que se necesita es luchar contra la evaluación se necesita conocer cómo se está haciendo, no nada más saber que se está haciendo, sino con qué características e instrumentos, para así poder saber contra qué se enfrentan, no sólo contra quién, pero no.  

Después organicé un Congreso de educación que fue bastante crítico y muy interesante, pudo serles útil, porque   las mismas autoridades de la SEP se volvieron muy críticas, pero algunos dijeron que estaba mal lo que estaba haciendo. En el hotel en el que se hizo el congreso, llegó un grupo de la sección 22 con sus altavoces y cuando vieron que estaban yo allí y empezaron a gritar “ese Benjamín, traidor de la comunalidad, del sindicato, demagogo.” 

ME. - A qué le atribuyes tú esa oposición, ¿estabas haciendo algo que no aprobaba el sindicato? 

BM.-Exactamente, el Fondo Editorial no era una instancia que tuviera una relación negativa con el sindicato y nunca ha sido un espacio que el sindicato quiera atacar, incluso el Fondo Editorial  se abrió un tiempo para para publicar con ellos  cosas de maestros, entonces se llevaban bien con  el director del Fondo Editorial,  Fidel Luján, quien cuando llegué, era un maestro sindicalizado del nivel de formadores de docentes, tenía una buena relación con  grupos de políticos  del sindicato y por tanto con autoridades, entonces ahí nunca nos atacaron, había buena relación, los libros se distribuían a veces entre dirigentes de la sección 22, por eso es que tenía buena relación, yo como trabajador, pero además, como colaborador de eventos de formación. Después seguí dando cursos de formación, pero como ya estaba yo en un área que sí era directa enemiga principal del magisterio, la Dirección de Evaluación, y era en los meses en los que se hizo la evaluación sobre todo entre agosto a noviembre del 2015 y el Congreso de educación que te digo fue en diciembre, entonces estaba caliente la cosa, y no importaba lo que yo editara o escribiera, lo que importaba era simplemente que yo estuviera ahí. Me hicieron a un lado, pero la gente con la que más he trabajado y que me conocía, seguía invitándome y seguimos organizando cosas, pero contra la voluntad de la sección 22 y bajó la crítica de ellos y del propio sindicato que les decía que estaban colaborando con los “espurios”, esa es la palabra que usaban. 

ME. - Empezaron muy democráticos al principio, tengo la idea, tú corrígeme, de que poco a poco se empezaron a convertir en una élite que podía manipular como si fueran patrones, te pueden castigar, te pueden obligar a ir a marchas, te pueden cambiar de plaza, etc. esa es una especie de corrupción ¿cómo la llamarías tú, es un sindicato charro o qué? 

BM.-  Esas acciones laborales autoritarias que hace la Sección 22 le han servido  para tener fuerza como corriente contrahegemónica, pues obligar a todos los maestros a ir a las marchas, a ganar puntos sindicales por estar en plantones y todo eso, es un exceso contra sus compañeros, pero era una  medida que resultó acertada contra los muchos maestros que todavía había de Vanguardia Revolucionaria y priistas, entonces a éstos los amarraban y eso permitió que la corriente democrática se desarrollará con la fuerza que ahora tiene. 

ME. - ¿Quiénes eran estos de Vanguardia y priistas? 

BM. -  Estos de Vanguardia eran los que tenían el poder en el SNTE, pero en la Sección de Oaxaca sólo hasta 1980. Era el tiempo de aquel, no sé si te acuerdas, muy famoso que era Carlos Jongitud Barrios, era el líder nacional de Vanguardia, antecesor de Esther Gordillo, él era el que controlaba el sindicato, su corriente se llama Vanguardia Revolucionaria, la que controló la Sección 22 hasta 1980 cuando el movimiento democrático la desplaza del poder en las elecciones  y quedan los maestros democráticos, corriente que desde 1980 ha estado luchando contra Vanguardia Revolucionaria, que eran en su mayoría priistas. 

ME. -Pero sigue todavía funcionando en cierta forma Vanguardia y los priistas. 

BM. - Los priistas sí, pero Vanguardia no, ésta se acabó, ahora la corriente de Esther Gordillo es la que tiene el control nacional y acá se expresa claramente en la sección 59 que se formó en 2006. El problema para mí de la Sección 22 no son esos excesos que han tenido resultados positivos para fortalecer al movimiento, sino el ascenso y caída como movimiento: distinguiría dos momentos, uno, de ascenso que va de 1980 a 1992, y luego un proceso de estancamiento y caída que es del 1992 al presente. 1992 es una fecha muy importante en la historia del sindicato porque ese es el año en el que se crea el IEEPO (Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca), o sea que la unidad de Servicios Educativos se convierte por fin en  Instituto y en esas negociaciones  con Heladio Ramírez, la Sección 22 logra que los puestos de dirección de los niveles educativos, o sea, los directores de educación preescolar, de primaria, educación indígena, educación física, educación especial, todos ésos, que no fueran electos por el IEEPO ni el Gobierno sino que los eligiera la Sección 22. Entonces desde el 92 los maestros del sindicato dirigían la educación en Oaxaca, no era el viejo IEEPO. Los maestros como directivos en el IEEPO no controlaban las plazas directamente, pues la administración nunca lo soltó, la administración de recursos tampoco, ni la elaboración de planes tampoco, pero la conducción de los niveles educativos sí cayó en manos de magisterio y el único que creo que lo aprovechó bien fue Educación Indígena, porque desarrolló su propio modelo y trabajos educativos importantes desde 1995 o antes. Ese fue el logro sindical del año 92, el nombrar desde entonces a los directivos de los niveles educativos del IEEPO. Este acuerdo fue el que se canceló en el 2015 con la creación del nuevo IEEPO, el objetivo del gobierno era cancelar esa posibilidad y que todos los maestros que estaban dirigiendo los niveles educativos se regresaran a sus centros de trabajo, eran casi mil maestros trabajando en el IEEPO en los niveles educativos. 

 

ME. - Esta sección que tú hablas, la del indigenismo, ¿todavía persiste? 

BM.- Es la que está realmente fuerte, en general yo estoy convencido de que Educación Indígena ha sido la parte más radical, la mejor organizada y la más coherente del magisterio desde antes de 1980 aquí en Oaxaca, han seguido y han aprovechado los logros sindicales para convertirlo en propuestas educativas, y entonces cuando en el 2015, Gabino Cué  decreta que se acaban las relaciones con la sección 22 y que todos los maestros que estaban en el IEEPO deben de regresar a dar clases bajo el lema aquel de que los “administradores administran y los maestros enseñan”, esa era su consigna, entonces todos los maestros se regresaron menos los de Educación Indígena (que son más de 15 mil entre docentes y administrativos), que se reunieron en asamblea y decidieron seguir dirigiendo la educación indígena sin dejar la Dirección de Educación Indígena en el IEEPO, entonces ellos la llamaron Dirección de Educación Indígena en Resistencia. El IEEPO no lo aceptó y nombró su propia Dirección de Educación Indígena, el problema era que a la dirección del IEEPO no la pelaban la mayoría de los supervisores, ni los directores, ni los maestros, se hizo una situación horrible, el IEEPO no sabía qué hacer. Y así se estuvo varios años hasta que en el 2019 el movimiento de resistencia decide dar un paso más y convertirse en Dirección General de Educación de los Pueblos Originarios de Oaxaca (DGEPOO), y exigirle al gobierno que los reconozca a ellos y ya no a la dirección que tenía el IEEPO. La lucha sigue, de todos modos, ahora hay dos direcciones, la mayoritaria y la del IEEPO, que realiza algunos trámites oficiales, pero nada más, no tiene realmente el poder. Ese otro fue el único nivel educativo que sí tuvo fuerza y adhesión para enfrentar y resistir realmente la dirección del IEEPO. 

 

ME. - Dices que había hay dos direcciones, pero me pareció que repetiste dos veces IEEPO 

BM. - No, dije DGEPOO. 

 

M.- Perdón, pero este grupo indigenista digamos ¿son profesores indígenas. hablan idioma? 

BM. - Los trabajadores de la Educación de la Sección 22 deben ser hoy unos 90,000, de esos casi 20,000 son de Educación Indígena, de estos 20,000 deben de ser unos 12,000 maestros y 7 000 ó 8000 administrativo. Los administrativos no todos hablan la lengua, pero son originarios de comunidades, los maestros, los docentes, sí, se supone que todos hablan, el problema es que por derechos sindicales y por decisión del IEEPO los mandan a comunidades en las que no se habla su lengua, entonces hay miles de maestros indígenas dando clases de español porque están en lugares en donde no se habla su lengua 

 

ME. -  Mandarlos en esa forma donde no se hablan los idiomas, ¿es una forma de castigo? ¿Por qué una política tan tonta? 

BM. - Este procedimiento, que genera lo que se llama desubicación lingüística, tiene dos características, dos raíces digamos, una, la decisión de la autoridad o del sindicato en el sentido de que a los maestros que recién se contratan tienen que ir a los lugares que nadie quiere, como quien dice empezar en los lugares de castigo. porque por derechos sindicales o por derechos educativos, o sea, por puntos, los maestros tienen la posibilidad de pedir cambios e irse acercando hacia algún lugar que ellos quieran, entonces empiezan en lo más lejos y se van acercando poco a poco a la ciudad o a donde  quieran; entonces, esa es la posibilidad  que brinda la autoridad, el otro problema es que a muchos maestros indígenas no les interesa estar en su región ni  en su lugar o lugares donde se habla su lengua sino donde tengan  mejores condiciones, porque la verdad es que como educación indígena es el nivel en que se paga menos, donde históricamente ha sido así, entonces muchos maestros querrían acercarse hacia otras  lugares más cercanos a las ciudades para poder pensar en cambiarse de nivel donde se paga más: de Educación Indígena a maestros de Primaria General o a Preescolar, así ya no trabajar en educación indígena. 

 

ME. - Entonces, ¿los sueldos no eran parejos? 

BM. - No, no eran, los sueldos no eran parejos, principalmente los de educación indígena eran una especie de cola, una concesión del Gobierno; entonces no se exigía de los maestros ni siquiera que tuvieran licenciatura, se llamaba “educación informal” o sea, en todo el sistema educativo la educación era formal menos educación indígena, entonces recibían menos sueldo. Esta fue una de las de las luchas primeras del sindicato, ahora ya van un poco mejor, pero los que más ganan son los maestros de Secundaria y después los de Primarias, luego Preescolar; educación indígena gana menos que los de Primaria General, o de Preescolar. Los que ganan bien son los de secundaria.  

 

ME. - Este grupo tan interesante ¿qué relación tiene con el Consejo Nacional Indígena, con los zapatistas?  

MB. - ¿Los de educación indígena? 

ME. - Sí. 

MB. -  Yo no creo que tenga mucha relación, así directa, porque el asunto está en que los zapatistas realmente corrieron a todos los maestros sindicalizados de su territorio, o sea, en los municipios zapatistas, una de las primeras decisiones fue que no se aceptaba maestro sindicalizado, ningún maestro de parte del Gobierno, que solamente podrían dar clases en municipios zapatistas maestros que estuvieran dispuestos a dar clases por servicio o sea como tequio. Su sistema educativo nomás tiene un solo nivel digamos, que es una especie de primaria y secundaria juntos, entonces los maestros son jóvenes que se eligen en las comunidades, los forman para ser los docentes que van a dar las clases, y cumplen con su servicio 3 ó 6 años, no sé exactamente cuántos, y ya como un cargo cualquiera, dejan ese cargo y ya no vuelven a ser maestros. 

 

ME. - Cómo me suena eso a los antiguos catequistas allá en los 50 O 60s. porque aparte de enseñar catecismo, y atender al cura, daban clases, alfabetizaban, etc. 

BM. - Yo creo que muchos de ellos son los que siguen siendo maestros, pero ahora reconocidos por la autoridad rebelde, yo creo que muchos de ellos siguen siendo porque de los dirigentes zapatistas varios son de esos, incluso algunos de los comandantes parecen eran diáconos. 

 

ME. - Fácilmente, se oye eso mismo. Pero, de todos modos, aunque corran a los sindicalizados en Chiapas, estos grupos más indígenas aquí en Oaxaca ¿están o no con el Consejo Nacional Indígena? ¿qué relación tienen. no como como educación indígena sino como sección 22?  

BM. - Sí la tienen, pero no como educación indígena, sino como sección 22, porque es una decisión de la sección 22 de vincularse con el Congreso. La Sección 22 tiene una de sus carteras o de sus  cargos  la Secretaría de Relaciones entonces esos son los que se encargan de estarse vinculado, hacer  relaciones y alianzas  con ese tipo de organizaciones, pero  es  realmente cada vez  menos,  ahora que me que me pongo a pensar en eso, cada vez veo menos la relación con  los zapatistas, pero más bien el fortalecimiento de relación con maestros rebeldes de otros Estados, con  la Coordinadora de Educación o sea, con Michoacán, Guerrero y Chiapas, pero con  zapatistas no tanto. 

  

ME. - Para acabar de completar la información, ¿tú crees que tiene remedio el IEEPO?  

BM. -Yo creo que el IEEPO iba bien hasta antes de que Gabino Cué se arrodillara ante el presidente y aceptara romper relaciones con la sección 22. Había habido una relación muy estrecha entre la sección 22 y el IEEPO, pues desde el 2009 cuando el presidente  era Calderón y sacó lo que se llamaba  la Alianza por la Calidad de la Educación, la sección 22 en la asamblea decidió oponerse e impedir que  esto llegara a Oaxaca porque significaba transformar el sistema educativo, era una cosa no muy grave, pero la Sección 22 se opuso, fue el estado que más se opuso,  de manera que no sé bien por qué el Gobierno federal aceptó que no  avanzara la aplicación de esa Alianza por la Calidad de Educación en Oaxaca, pero que a cambio tenía que presentarse una propuesta alternativa, entonces la sección 22 junto con el Gobierno del Estado empezaron a reunirse para planear esa propuesta alternativa, que es el famoso PTEO que tanto se oye, es la propuesta que presentó en 2011 o en 2012 el magisterio junto con el Gobierno frente a la Alianza por la Calidad de la Educación y se empezó a impulsar en escuelas. Tan había relaciones positivas que ya que se terminó de elaborar el PTEO el gobierno a través del IEEPO empezó a hacer pruebas piloto a cargo del Prof. Javier Sánchez Pereira, y se hicieron ajustes; en la sección 22 algunos maestros medio no entendían, otros  protestaban, no le hallaban sentido, pero otros sí y entonces empezó a avanzar el PTEO de manera que este grupo que se reunía entre el IEEPO y la Sección 22 decidieron avanzar más y proponer una ley estatal de educación en la que el PTEO  fuera la nueva forma del sistema educativo de Oaxaca, entonces empezaron a elaborar esa ley. En el 2014  se terminó de hacer la ley y se  hicieron foros de consulta con las bases, unos treinta y tantos, para que validaran esa propuesta que se había hecho en conjunto  no solamente con el IEEPO sino también con el Congreso pues hubo diputados que participaron también en la elaboración de esa de esa ley, había muy buena relación pero yo creo que el Gobierno Federal se dio cuenta de que eso iba a poner en jaque al  Gobierno del Estado y al sistema educativo porque la relación había sido tanta y tan compenetrada entre la Sección 22 y el Gobierno del Estado que me contaba el profesor Fernando Soberanes, quien estuvo en el grupo que  elaboró la propuesta de ley, que los avances iban por buen camino y que incluso había excesos desde la Sección 22, por ejemplo cuando  quería que en el cuerpo de la propuesta de ley se dijera que la filosofía que orientaba al sistema educativo en Oaxaca era el materialismo histórico…  Se presentó en 2014 y en el 2015 es cuando sin decir agua va, el Gobierno decide romper relaciones con la Sección 22, entonces ya no hubo ese apoyo gubernamental al PTEO ni a la ley, que en el 2016 se aprueba, pero sin ninguna mención al PTEO, aunque buena parte de la propuesta educativa de la iniciativa original se aprobó. Así que realmente se rompe una relación que durante varios años resultó bastante fructífera y que podía llegar a ser una buena relación y sobre todo educativa, o sea, una relación de armonía política que permitiera el desarrollo de iniciativas educativas que era lo que lo que quería el magisterio y con lo que estaba de acuerdo el IEEPO, pero el Gobierno federal intervino, y esta posibilidad se rompió desde el poder, con mucha agresividad.  

 

ME. - Y en eso están ahora, ¿no?  

BM. - En eso. La Sección 22 quiere recuperar la capacidad que tuvo de decidir quiénes eran los que dirigían la educación, los niveles educativos como lo lograron en1992 y volver a hacer una ley de educación con base en el PTEO, pero ahora no cuentan con el apoyo del Gobierno ni del Congreso. 

 

ME. - A mí me queda todavía, en mi ignorancia, una confusión, una cosa es el IEEPO y otra la Sección 22, pero veo que los sindicalistas de la Sección 22 están metidos en la administración del IEEPO, o ¿no?  

BM. - No, a estos, creo, que a todos los sacó el decreto del 2015, maestros de los más gruesos de la Sección22, los más reconocidos, los que dirigían las asambleas, sí había algunos como administrativos, otros, como como directivos de los niveles, pero a todos los sacó el magisterio y puso puro burócrata la verdad, incluso traídos de otros Estados.  

 

jueves, 12 de agosto de 2021

 

In Memoriam

Philip A. Dennis (1946- 2021)

Manuel Esparza

 Philip junto son sus hermanos mayores Art y Lynn vivió de niño en Irak (1952-53) donde su papá P. Eldon Dennis fue comisionado por la ONU para un proyecto de desarrollo ya que era Ingeniero de aguas subterráneas A sus escasos 6 años iba y venía caminando solo a la escuela, así de pacífica era Bagdad. La escuela era para niños de extranjeros e iraquíes acomodados, ahí enseñaban monjas inglesas y francesas. Phil recuerda cómo empezó a odiar las clases de inglés, pues la monja inglesa, una gorda tipo sargento se la pasaba inútilmente corrigiéndole su acento texano, en cambio las francesas gozaban enseñado su idioma y felicitándolo por su avance en la lengua. Irak iba a marcarlo para el resto de su vida. Allá la familia trató a un ingeniero iraquí que además era Bahaí, Abbas Baghdadi. Fue tanto el trato con esa persona que sus papás se convirtieron a esa fe. Ya de regreso a Lubbok, Texas, ese ingeniero visitó a los Dennis, años después moriría terriblemente torturado por el régimen represor. Texas Tech fue la universidad donde su padre enseñó y donde Philip después de graduarse en la Universidad de Cornell iba a enseñar también durante 34 años. Aquella exposición a personas de otros idiomas y costumbres, más su disposición personal, le ayudó a hacer investigación en Oaxaca, el norte de Brasil, Costa Rica y entre los miskitos de Nicaragua donde aprendió el idioma. El ejemplo de sus padres practicantes del humanismo Bahaí, fue algo que internalizó en su trato con la gente que conoció en las investigaciones de campo, entre colegas que ayudó facilitándoles estadías en Texas Tech, en auxilio de los discriminados públicamente como personalmente pude observar en mis correrías con él en Estados Unidos y varios estados de México. Mis hijos le están agradecidos por haberlos recibido por meses en su casa para que aprendieran inglés en las escuelas públicas y campos de verano. Conocí a Philip en Cornell y pronto nos hicimos amigos, soy padrino de Conrad el menor de Brian y Kari. Cuando estuve en cuidados intensivos por un infarto, él vino a visitarme a Oaxaca. Cuando se jubiló se cambió con su esposa Becky a California donde también estuvo enseñando en la Universidad de California en Chico. Con Gabriel mi hijo fui a verlo en 2015 cuando Kari su hija le organizó un homenaje y cuando ya era víctima del Alzheimer. El año de la pandemia del 2020 cayó víctima del Covid-19 y estuvo hospitalizado como último recurso pues los pronósticos eran muy negativos. Le salió lo texano y se recuperó de la infección, pero el Alzheimer siguió su destrucción y tuvo que ser internado en un asilo bien atendido en Lubbock. En su retiro en Chico tuvo tiempo para reflexionar cómo hubiera sufrido su padre con la invasión americana a Irak, país que tanto quiso. Phil escribió sobre sus compatriotas ignorantes unos, otros creyendo en la rectitud de su gobierno: “¿De dónde sacaron que quitando a un dictador, y luego ocupando su país militarmente llevarían paz y bienestar? ¿Hasta qué profundidades de locura hemos descendido? ¿Cómo podemos prevenir esos colosales errores en el futuro?” Y en su mente que ya no recuerda igual, aún se hace esa pregunta cuando recibe noticias de lo que sucede no sólo en el medio oriente lejano, sino en su propio país. Tenía esperanza de que en las próximas elecciones el país supiera elegir al que corrigiera el rumbo…”(datos de “A Chico man remembers living in a peaceful Iraq¨ by Phiip Dennis, Chico News & Review, Volume 35, Issue 32, April 5, 2012). En el homenaje por sus 70 años en 2015, se le notaba preocupado, casi angustiado por terminar de fotocopiar suficientes copias para los invitados de una serie de bignettes sobre su estancia entre los miskitos. Ya llevaba tiempo diagnosticado de Alzheimer aunque no era notorio, pues seguía enseñando en la universidad, y menos, en los escritos breves que repartió, es tal humor de lo que cuenta, los nombres de personas y lugares, que nadie sospecharía que estuviera enfermo. El quería que se publicaran sus artículos en forma de libro. También deseaba escribir una historia de vida de Víctor, un pescador miskito que fue su informante, compañero de viajes, constructor de su palafito y con quien se llamaban de hermano según la costumbre miskita después de conocerse durante 20 años desde 1978. Quería algo parecido a la Historia de un bracero de Zenón Ramírez de Oaxaca. Tuvo una relación parecida con Beto de Santiaguito, Etla, donde hizo investigación para obtener el doctorado en 1970. Cada vez que regresaba a Oaxaca iba a visitar a su amigo. Este Beto era una leyenda, hombre de campo macizo que nada lo detenía, fue el primero en Oaxaca que pudo bajar la señal de televisión por medio de una antena hecha de colchón de resortes que se usaban antes, era mecánico de coches, hubo vez que fue a componer la máquina del ferrocarril que nadie lo podía arreglar. En toda la región de los Etla, don Beto instaló bombas de agua que también reparaba, ideó hacer pozos de agua con anillos de concreto que se iban bajando conforme se escarbaba, logró que los campesinos hicieran represas por todos lados. A mí también me hubiera gustado haberlo grabado, eran incontables sus experiencias cada vez que le llevaba el viejo Datsun a servicio. Su hijo Beto aún conserva y mejora el taller mecánico y la granja justo a la entrada del pueblo a un lado de la carretera hacía México. Beto siempre me preguntaba cuándo iba a regresar Felipe, lo mismo hace mi dentista Dr. Ángel Gómez con quien venía a tratarse desde Estados Unidos. Así respetaba y se llevaba Felipe con la gente que rápidamente se ganaba su amistad, una cualidad envidiable para un antropólogo. Profundamente preocupado por las clases pobres, los indígenas y sus culturas tradujo al inglés el México profundo de Guillermo Bonfil (Mexico Profundo: Reclaiming a Civilization,The University Texas, Press, 1966). En sus mismas palabras: “la mayoría de los antropólogos que han vivido con otras gentes…sienten la necesidad periódica de regresar. El trabajo de campo te abre las puertas con la gente, se hacen relaciones que duran toda la vida….y cuando se presenta la ocasión se impone regresar”. (Introducción, The Miskitu People of Awastara, University of Texas Press. 2004). En su primer matrimonio con Mary Beth, además de sus tres hijos, obtuvo contacto con la fe católica que le era desconocida, y la práctica de ésta ya no nunca lo dejó, con su familia asistía a misa los domingos en la parroquia para chicanos de Lubbock, a donde me obligaba acompañarlo cuando estuve de profesor visitante en el Texas Teck. No había modo de zafarse, pasaba por Ángeles, los niños y por mí en su destartalado Volkswagen, carro que contrataba con los Cadillacs blancos que llevan a los texanos los domingos a sus diferentes servicios religiosos. Todavía con Kari, en San Francisco, días después de la celebración de sus 70 años, en una fonda japonesa donde comimos quiso dar gracias primero tomándonos de las manos. Siendo un conquistador natural, no tuvo mucha suerte con las mujeres con las que se casó. Becky su tercera esposa fue su inseparable compañera que lo acompañó hasta el fin de su vida

domingo, 10 de enero de 2021

Al descubierto el líder mundial de la democracia

  

Washington 6 de enero, 2021

Al descubierto el líder mundial de la democracia

Manuel Esparza

 

Los acontecimientos violentos fueron vistos por millones alrededor del mundo. Desde este lado de la frontera el comentario espontáneo fue señalar qué tipo de país soberbio es ese que impone a los demás su “democracia.” Sin embargo, lo acontecido no debe ser sólo para echar más leña al fuego, sino para tratar de entender la conducta humana cuando se manifiesta tan masivamente. Tan llamativa manifestación irrumpiendo en el Congreso, algo nunca visto antes en la memoria reciente de la gente, tenía que tener un culpable, y la opinión más repetida en las transmisiones era el presidente Trump que estuvo incitando a la población a acudir el día que el sistema certifica la elección del Ejecutivo. La justificación de la manifestación era que la elección presidencial había sido fraudulenta.  Motivo suficiente para movilizar a la gente que tiene muy enraizada la convicción de que su democracia es un valor sagrado. Algo semejante sucede en otros países cuando se manifiestan masivamente contra los constantes regímenes dictatoriales, ¿por qué no en Washington también?

Las acciones en aumento hasta entrar al segundo piso del Capitolio rompiendo ventanas, vandalizando escritorios, sentándose en la silla del que hasta unos momentos antes presidía el acto, congresistas escondiéndose tras los asientos, policías amenazando con sus armas a los revoltosos que querían tirar la puerta de la Cámara de los Representantes, la noticia de una mujer baleada: esas imágenes fueron muy fuertes y desconcertantes para los norteamericanos.

Esos son los hechos, ¿cómo interpretarlos? La opinión más repetida en los medios de ese país era que Trump incitó a miles de gentes a manifestarse contra la validez de la elección, entonces uno concluiría que esa turba de seguidores ciegamente se dejó llevar, los mismos congresistas insistían que Trump debía hablar en público ordenando fuertemente que la gente se retirara, era el único que lo podía hacer. Sin embargo, los millones de ciudadanos que votaron en el primer periodo de Trump no acudieron a las urnas sólo por obedecer sus peroratas políticas, vieron en él sus derechos protegidos, la agenda del Partido Republicano robustecida: ideología política sustentada de padres a hijos, valores religiosos asegurados, la mentalidad de supremacía blanca, la aceptación social de los triunfadores, el estigma de ser perdedor.

Las escandalosas escenas vistas sirven para confirmar cómo funciona el cerebro en la intelección, en la toma de decisiones: de la mano de las emociones y sentimientos. Ver esa multitud en acción sólo por la insensatez del mandatario, es suponer que no son personas racionales, son “borregos” en el apelativo popular. La fuerza de lo emotivo puede sobreponerse a la realidad, pues ésta se percibe no desnuda, sino coloreada por las convicciones emotivas. En el caso, la imponente realidad era que la elección sí fue legítima, que no había pruebas de fraude, que fue la elección fue ratificada repetidamente por las mismas instituciones del tan venerado sistema, pero todo eso no fue suficiente evidencia que sofocara el sentimiento humillante de haber perdido la elección y con ella  los privilegios que se disfrutaban.

Es de la misma sociedad americana la opinión de que el sistema político tiene que ser reformado especialmente, aunque no sólo, el candado a la libre elección que ejerce el Colegio Electoral. Mecanismo que asegura el privilegio de sólo un estrato de la población. En la historia del país desde su fundación el acceso al poder no es directamente del pueblo, es el privilegio de la clase adinerada. Hubo tiempo que el presidente era un administrador encargado de asuntos internacionales. El Senado ejercía el mayor poder, entonces no se elegían a los senadores, estos eran elegidos por la asamblea legislativa entre los pudientes, fue hasta hace un siglo que se empezaron a elegir democráticamente.

 James Madison fue el gran artífice de la Constitución y de la democracia de su país, el que opinó que sólo los ricos son los que pueden ver por el bien de la gente. La principal tarea de la sociedad es “proteger a la minoría de los opulentos frente a la mayoría.” Ese reservatorio exclusivista se mantiene en el Senado, el que ahora deja de ser Republicano, el que junto con la Cámara de Representantes fue asaltado por la multitud, ¿cuánto no afectará a la población ver mancillado el sancta sanctorum de la democracia?

En México se siguió con interés el proceso de la elección en Georgia, y se enteró de lo sucedido el día de Reyes. Uno se pregunta si va a servir para analizar la propia vida democrática. En medio de la pandemia, el confinamiento, los infectados, los muertos, se constata lo que sucede en situaciones de peligro, de creciente decepción por la lentitud de los cambios: señalar a un culpable. Aquí en México ya se sabe quién es, y se le insulta, caricaturiza, se critica cualquier medida que ejerza él o los miembros de su gabinete. Es tal la ferocidad en los ataques, el poco raciocinio en el análisis de lo que acontece, la difusión de mentiras que no se puede menos de notar en los medios, y muy especialmente en las redes sociales, que lo que predomina es la pasión, la emotividad, el refugio a la tradición partidaria, a la educación familiar, religiosa, escolar. Es llamativo que se critique a Trump como un loco, un líder paranoico odiado, un mesías dictador, y que se iguale a AMLO con aquel. Los paralelismos son obvios, o ¿no? Dos líderes resentidos por perder las elecciones, el nuestro dos veces protestando hasta el cansancio por el fraude, y cuando gana a la tercera vez apoyado por una gran mayoría, los “republicanos” mexicanos se lanzan a obstaculizar la administración, se aglutina el equipo de gobernadores excogitando cómo derrocar al partido en el poder y así regresar a los buenos tiempos de bonanza de la “minoría de pudientes”; más de 600 académicos, periodistas, artistas ahora preocupados por la falta de libertad de expresión,  grupos de feministas aguerridas infiltrados de provocadoras en busca de mártires destruyen monumentos históricos, intentan incendiar el portón del Palacio Nacional, precariados toman por asalto la plaza mayor con tiendas de campaña la mayoría vacías, la labor de zapa de románticos anarquistas que incitan a no obedecer las medidas de confinación contra el contagio. Pues aquí también hay paralelismo: los asaltantes del Capitolio y los miles que los apoyaban contaron con la ausencia de las fuerzas del orden, los dejaron hacer. Acá la destrucción de comercios, bienes nacionales, protestas violentas no son prevenidas ni menos castigadas por las policías.  Con toda honestidad, ¿son iguales las dos circunstancias? Responda el que sepa analizar objetivamente, no es ejercicio vano cuestionar al que lea esto si se tiene en cuenta la proliferación de opinadores, ahora hay expertos en sismos e inundaciones, epidemiólogos improvisados dando remedios caseros contra el COVID, otros tratan de convencer que el dióxido de cloro sirve para evitar contagiarse del virus.  La mortalidad del virus siendo el tema más repetido, se entiende que ante tan amenazante posibilidad de morir se busque culpables. Este es otro paralelismo, en Estados Unidos se culpa a Trump del tremendo número de muertos de cada día dada su esquizofrénica actitud ante la epidemia. En México igual, con el agravante de que quizá sea por primera vez que se tenga un experto de la salud coordinando las medidas necesarias, pero que sea el señalado como un inepto y falseador de la verdad. Si logran destituir a Trump como están proponiendo en ese país, verá Ud. cómo nuestros resentidos políticos y la emotiva turba con deficiente desarrollo límbico de auto control aumentarán sus campañas en el mismo sentido.

Muy llamativo para los televidentes fue ver que a pesar de la insania de Trump los principales funcionarios no lo reconvenían, se daba como explicación que tenían miedo del explosivo ocupante de la presidencia. AMLO también ha tenido miedo de las arbitrariedades de aquél, muchos mandatarios de otros países tienen miedo de antagonizar al terrorista mundial que llega hasta tomar medidas contra los que comercien con los designados en turno como gobiernos “antiamericanos.” Atrás se oye en eco las palabras de Adam Smith “Todo para nosotros, nada para los demás” y su confirmación Trumpiana: “Make America First”. Lewis Powel ya le daba la razón a esta forma dictatorial de descalificar a los que critican al imperio: “Nosotros tenemos el dinero, nosotros somos los que administramos, e imponemos disciplina.”[1] Es inevitable cuestionar a ese que se dice ser el líder mundial de la democracia, el que quiere llevar a otros sus valores de justicia y libertad por medio de derrocar mandatarios democráticamente electos, imponer dictadores, saquear la riqueza, arrasar sus territorios. Difícilmente habrá cambios substanciales en la política imperialista cuando la población siga creyendo ser excepcionales, que  “God is with us”, “We claim to be a nation under God”[2]

La era de Trump y su fallida toma del poder revela que la “más grande” democracia del mundo es frágil, que el Goliat tiene pies de barro, bien harían los gobiernos dejar de temer las represalias políticas y económicas de Washington y ayudar así a lograr algún cambio por mínimo que sea para bien de la humanidad.

 

 

 

 



[1] Memorandum Powell, Lewis F. Powell Jr. 1971 citado en Noam Chomsky, Requiem por el sueño americano, Los 10 principios de la concentración de la riqueza y el poder, México, Sexto piso 2017:34.

[2] Obispos americanos condenando los hechos catholicnewsagency.com