lunes, 3 de noviembre de 2014

Agandalle de tierras oaxaqueñas: una vieja pretensión de Chiapas


                                                        Manuel Esparza


Y van y vienen oficios de los dos lados de la frontera estatal. Vienen y se van gobernadores sin que pongan un alto a las invasiones chiapanecas. Funcionarios mandan sus huestes a sacar copias fotostáticas de cuanto documento encuentren con la esperanza de que en alguno se hallen las elusivas mojoneras divisorias. Otros metidos a improvisados historiadores opinan sobre los orígenes de los antiguos habitantes de los Chimalapas y aceptan títulos primordiales falsos.

Para documentar el presente.
Se sabe que Eduardo Martínez fue el topógrafo que obedeciendo órdenes hizo correr hacia territorio oaxaqueño la línea limítrofe del mapa oficial de Chiapas.  Es sabido que Ernesto Castellanos Domínguez hermano del entonces gobernador  Absalón Castellanos asentó sus reales en este lado de territorio oaxaqueño. Eso le mereció en 1986 que sus huesos dieran en la cárcel de los municipios zoques afectados por la rapiña de madera que hacía durante años. El general Absalón, por cierto,  sería en 1994 hallado culpable por EZLN de crímenes contra los indígenas chiapanecos y dejado libre por los mismos zapatistas  para que viva  ¨hasta el último de sus días con la pena y la vergüenza de haber recibido el perdón y la bondad de aquellos a quienes tanto tiempo humilló, secuestró, despojó, robó y asesinó¨.
         El siguiente gobernador Patrocinio González Garrido (1988-93) continuó con la política de invasión de territorio oaxaqueño, e intensificó las medidas para no llegar a acuerdos conciliatorios entre los dos gobiernos desde su puesto de Secretario de Gobernación  con Salinas (1993-94). Hasta policía chiapaneca había en San Isidro la Gringa aprovechándose del gobierno pusilánime de Oaxaca.  Pero en el fondo el conflicto no se resolvía porque entre gobernadores priistas no había pleito, había reparto. Y así ha seguido hasta el presente el problema de límites  con la fútil esperanza de que la Suprema Corte lo dirima.

 Los límites de los obispados de Oaxaca y Chiapas en el s. XVIII
Desde temprano en el s. XVI la diócesis de Antequera colindaba con Tlaxcala, Chiapas y Yucatán de suerte que la jurisdicción eclesiástica llegaba hasta Coatzacoalcos. Es precisamente en la parte norte donde el río Mezcalapa dividía los dos territorios que se dio una controversia por los límites de los obispados. Como en todos estos conflictos, hubo un pillo llamado Félix de la Cruz que instigó para que se hiciera una ermita en el pueblo ribereño Mezcalapan o Los Naranjos y para que en adelante  dependiera de  la diócesis de Chiapas. El mismo Félix conchabó al teniente más cercano del pueblo de Ocuapan para que no parara la obra de la ermita a pesar de estar expresamente prohibido ese tipo de edificios de culto sin expresa aprobación de la Corona. En 1781 el obispo de Antequera, Joseph Gregorio de Ortigosa se quejó de la invasión de su jurisdicción con el virrey Martín de Mayorga (1779-83). Y es así como comienza una serie de oficios que van y vienen entre el virrey de la Nueva España y el Presidente de la Real Audiencia de Guatemala que entonces era Matías de Gálvez para que éste notifique al obispo de Chiapas Francisco Polanco (177-1784), por medio del fiscal del caso quien ordena al obispo  ¨ocurra al Superior Gobierno de México… y que se abstenga de conceder licencias para levantar ermitas aunque sea en su propia diócesis…¨.
   Y como en el presente,  se sucedieron gobernantes y obispos y el conflicto no se resolvía. Los obispos de Chiapas alegando que se traspapelaron los documentos, que no tenían dinero para hacer el viaje a México, etc. Fueron cuatro obispos desde que empezaron los reclamos en 1781 hasta 1804 en que ya no hay información y no se sabe cuál fue el final. La lista de virreyes que tuvieron que ver durante ese periodo de 23 años fueron diez.
   El pleito por límites entre las dos jurisdicciones es ilustrativo de cómo se movilizan los personajes e instituciones cuando están en juego intereses muy fuertes como es el de abarcar más territorio y concitar para que la jurisdicción de la autoridad cambie de sede, en último caso de la capital de la Nueva España a la Real Audiencia de Guatemala a través de la Intendencia de Ciudad Real (San Cristóbal). Las mismas mañas que se dan hoy  en la expedición de documentos, tortuguismo en responder, acudir a instancias superiores, en el caso el obispo de Chiapas  directamente a la Corona. Este tipo de documentos, sin embargo, al parecer que no tienen relevancia con el área de los Chimalapas donde se da el conflicto actual,  sí ilustra cuáles pueden ser los límites coloniales de las jurisdicciones legales en conflicto. La presencia de parroquias  y sujetos,  por ejemplo, en determinado lugar es indicativo de la frontera que había entre el territorio de la Nueva España y la Audiencia de Guatemala.   A eso obedece el interés de la Corona en saber los ¨´parajes, sitios y pueblos formados¨ en un obispado conforme a la Real Cédula del 21 de mayo de 1747 ¨en consecuencia de lo ordenado por la Ley primera, del Título decimocuarto del Libro primero de la Recopilación de Indias.¨ Se conoce la relación  detallada que el obispo de Ciudad Real  hizo en respuesta a ese ordenamiento con fecha 30 de diciembre de 1748. En el mismo texto se dice que se envió el plano ¨´de este obispado con la mayor claridad según lo encargado.¨ Se desconoce si en algún archivo está dicho plano que aclararía más los límites del obispado.

 (Textos de estos documentos en Archivo General de Chiapas, Boletín, Año III, No. 5: 25-76, Julio-Agosto de 1955).     

martes, 19 de agosto de 2014

La mano ensangrentada de Lenín y ¿la de Obama?


Manuel Esparza
                           
Estos son apuntes de una visita reciente a los dos Washingtons. Freemont, en el estado de Washington es una parte de la ciudad de Seattle muy liberal con tiendas y restaurantes de productos  orgánicos, gente que vota por los demócratas, donde se ven en las calles  expresiones físicas de preferencias sexuales, etc. En una esquina hay una enorme estatua de bronce de Lenín...Pues bien, las  manos aparecen en estos días pintadas de rojo, sangre que Rusia ha causado a la pobre Ucrania.  A pesar de ser tan liberales, no pueden menos de estar convencidos de la propaganda oficial, ni una palabra de que su país está metido hasta las cachas en todo ese problema  como lo está en Siria, Irán o Irak. Fue contrastante ver a la gente llenando lo restaurantes, paseando a sus perros, tomando sol en inmensos jardines públicos, ¿qué les importará lo que su gobierno hace fuera del país, qué sabrán de las matanzas en Palestina, de los miles de expulsados latinos? Lo que les interesa es acabar de salir del bache económico, que no les suban los impuestos. Lo demás, allá que lo haga el gobierno, ese es su trabajo.
         En el otro Washington, en la tripa de la bestia,  se ve de lejos la Casa Blanca  donde vive un negro que quiere pasar por blanco, que es demócrata pero actúa como republicano, que es el presidente más belicista de  la historia de ese país (el que más guerras ha emprendido, que ya es decir revisando la historia de otros presidentes), que ha separado cientos de familias, a padres de sus hijos, y que es zarandeado por las grandes corporaciones.

         En esa espaciosa ciudad cruzada por las tranquilas aguas del Potomac, donde se yerguen blancos monumentos neoclásicos, donde en la calle 16 existen toda suerte de  denominaciones religiosas en enjardinados  templos (toda una manifestación de politeísmo, así se digan muchos de ellos cristianos que en su mayoría aprobaron que Obama bombardera en el norte de Irak y que apoyan la brutalidad de los sionistas en Palestina) y sinagogas convencidas religiosamente de la honestidad de los  ataques genocidas de Israel. Al pasar enfrente de una sinagoga con enormes piedras a la entrada en prevención de un ataque terrorista… vienen a la mente las palabras del rabino Lerner doctor en psicología: ¨Este es precisamente el camino desastroso que ha tomado la comunidad judía americana y los judíos alrededor del mundo al cambiar la nación israelí por un estado judío convirtiendo así a Israel en un ídolo que debe ser adorado más que una entidad política como cualquier otra…. que debe ser llamada a cuentas por sus violaciones sistemáticas a los derechos humanos… La opinión idolátrica de que Dios está detrás de las Fuerzas de Defensa de Israel ha hecho creer a algunos judíos de que ese poderoso ejército es el ¨más moral ejercito de la tierra¨…cada acción del Estado de Israel contra los palestinos es visto como bendecido por Dios…No permanezcan sentados mientras los rabinos u otros hablan de que Israel está totalmente en lo correcto  y que los palestinos son el equivalente de Hitler…por favor no se callen mientras los rabinos se niegan a reconocer su idolatría y su ciego apoyo a las políticas de Israel.¨ (Rabino Michael Lerner ¨Mourning for a Judaism Being Murdered by Israel¨, tikkun.org, August 4, 2014, citado en Fred Gluecksmann https://col127.mail.live.com/default.aspx?tid=cmLfWNK2sm5BGKFgAjfeQaog2&fid=fltrash#tid=cmfwJi7i0i5BGHqgAiZMIHSg2&fid=flinbox).

         ¿Qué sabrán esas gentes de la capital de ese  país de lo que escribió  Paul Wolfowitz que fue subsecretario del Ministerio de Defensa sobre la estrategia para la defensa nacional de Estados Unidos y que explica por qué a Obama le interesa tanto los recursos de Irak, Irán y de la misma Rusia. En traducción libre del inglés: ¨Nuestro primer objetivo es prevenir el resurgimiento de un nuevo rival, así sea en el territorio de la anterior Unión Soviética o en otra parte que amenace el status que regía en la Unión Soviética…la nueva estrategia de defensa regional requiere que nos dediquemos a impedir que un poder enemigo domine en una región con recursos tales que se convierta en un poderío mundial.¨
         Le tocó a Wesley Clark quien fue Secretario General de la NATO clarificar en qué consistía esa ¨nueva¨ estrategia: ¨Atacar y destruir los gobiernos de 7 países en cinco años comenzando con Irak, luego Siria, Líbano, Libia, Somalia, Sudán e Irán.¨ Más tarde y a calzón caído Clark dijo claramente de que se trataba todo eso: ¨control de las vastos recursos de petróleo y gas en la región.¨ (Memo from the Office of the US Secretary of Defense citado en “Syria intervention plan fueled by oil interests, not chemical weapon concern“, The Guardian, (citas de Wolfowitz y Clark en http://www.informationclearinghouse.info/article39391.htm).  

         Cuando se intuye el poderío económico de las enormes corporaciones capaz de minimizar en el mismo Estados Unidos la separación de poderes, manipular a su antojo al mismo Ejecutivo, hacer guerras de invasión en donde se les antoje, entonces se ve qué pequeño e indefenso es México  con sus políticos y gobernantes sometidos a los planes e intereses de ese poderoso 1% del nivel mundial. Agachados les llamamos, pero teniendo en mente la otra significación de la palabra: la sodomización a la que tan alegremente se someten.  

viernes, 11 de julio de 2014

Antropología, política indigenista, religión

Palabras en la presentación de los escritos de Mardonio Morales, CEDUI-UNICH, San Cristóbal de las Casas, Chis, 7 de mayo de 2014  

                                        Manuel Esparza (INAH Oaxaca)

Antropología crítica
Son muchos los agentes externos que por décadas han estado en contacto con  esas comunidades: políticos, ingenieros, topógrafos, doctores, agrónomos, etc. En una forma muy relevante los antropólogos han estado presentes desde los años 50 cuando se fundó el Centro Coordinador del INI en San Cristóbal. Pronto proliferaron los proyectos de antropología de universidades extranjeras. Docenas de tesis doctorales e innumerables publicaciones dan cuenta de los estudios de algunos cuantos municipios de los Altos. La antropología aplicada del INI iba más directamente a satisfacer las necesidades materiales de las comunidades. Los internados, escuelas, albergues, capacitación a promotores en educación y medicina, la asesoría técnica en diversas áreas especialmente en la legal. La larga historia de los Centros Coordinadores hizo patente la reflexión teórica que se desarrolló a cerca de la situación de desigualdad en esas zonas de refugio.
         Por otro lado, la orientación  indigenista del Estado pretendía integrar a los indígenas a la única cultura nacional. Fue precisamente esta prolongada orientación la que hizo reaccionar a los antropólogos en contra del indigenismo oficial y en contra de las denominaciones religiosas vistas como agentes externos en contra de las culturas locales.
         En México a partir de 1968 comenzó una crítica severa a los organismos  en contacto con las comunidades indígenas, por un lado, las acciones evangelizadoras de la iglesia católica y protestante, y, por otro, la agenda integracionista de un estado en busca de una necesitada unidad nacional desde la Revolución de 1910. Es a partir de esa guerra devastadora que los antropólogos son llamados a intervenir en las políticas sociales. Y desde entonces la antropología ha sido el locus donde se conceptualiza y se dicta cuál debe ser la suerte de los grupos indios dentro del país. Así, la antropología aplicada en México ha tenido casi exclusivamente como objeto de estudio a los indígenas.
         Fue dentro del dominio de la antropología mexicana que se dio la confrontación con otros organismos que  reclamaban derecho de presencia en el medio indígena, fue en los círculos académicos de los antropólogos donde se tuvo por primera vez el juicio crítico  no sólo de lo que hacían las denominaciones religiosas sino las diversas agencias responsables de realizar la política oficial indigenista.

El factor aglutinador
Hubo un substrato en algunos de esos factores que hizo posible ¨la rearticulación de las identidades étnicas con los discursos políticos emancipatorios¨ (Harvey 2000:31) (i.e. las necesidad de  profundas culturales sociales  de las comunidades que encuentran una respuesta política libertadora): y ese factor articulador  fue la  influencia teórica y política del marxismo que dominó el pensamiento progresista de muchos movimientos sociales en América Latina desde la década de los 60s. Esa corriente hizo dar un cambio substancial a la antropología que se enseñaba y practicaba en México. De lleno entró la reflexión sobre la dependencia y el subdesarrollo de los países del área respecto a los centros de poder. Producto del cambio del estudio de comunidad y de la antropología cultural al más amplio del análisis estructural de regiones y países, y hacia una antropología económica y de aplicación para  la toma de conciencia de clase entre los grupos minoritarios indígenas, fue la crítica severa al indigenismo integracionista oficial.
         Así mismo ese denominador común marxista incidió en el cambio llamativo de una religión providencialista y conformista a una que exigía justicia antes que obras de caridad. Desde fin del Concilio en 1965, y dadas las directrices de la Conferencia de Medellín, la iglesia de América Latina tuvo que confrontar la realidad social de enormes poblaciones. Pronto se consolidó una fuerte orientación hacia una ¨opción preferencial por los pobres¨ y una voluntad comprometida a luchar contra la injusticia. Esta radicalización del pensamiento progresista religioso hacia una salvación de los oprimidos, no en un futuro impredecible, sino desde el hoy y aquí, halló resonancia con la muy anterior experiencia de lucha indígena contra la injusticia y la desigualdad lográndose así, en una primera etapa formativa,  la  concientización y organización de  los grupos indígenas de Chiapas por medio de un ejército de miles de catequistas-alfabetizadores.
         Un sesgo muy peculiar de la Iglesia en Chiapas fue y sigue siendo la llamada Teología India desarrollada por el mismo obispo Samuel Ruiz. Esta concepción está  más consonancia con los derechos de los pueblos indígenas, su cultura, su religión. Sin más acepta que no hay religiones buenas o malas, mejores o peores. Queda relativizada así la urgencia de una nueva evangelización toda vez que todos los pueblos del mundo conocen a la divinidad desde sus propias culturas. El tan deseado y poco cumplido deseo de autonomía se ve apuntalado desde la misma religión al optar ésta por combatir las causas de la sujeción  a los poderes establecidos (Teología de la Liberación) y aceptar al otro en sus más íntimas convicciones religiosas sin necesidad de ¨inculturarlo¨para cambiárselas[1]
         Esta mezcla de antropología crítica, religión comprometida, toma de conciencia de  los indígenas de su situación de explotación estaría en la base de un movimiento social y político de alcance mayor con características particulares del estado de Chiapas.
   La conjunción de un pensamiento antropológico crítico y una concepción desmitologizante de la religión ayudó a una toma de conciencia de la situación social de los indígenas. González Casanova escribiendo sobre los que ya antes del alzamiento en Chiapas  eran revolucionarios y los que por primera vez cobran conciencia revolucionaria ¨y ven lo nuevo de la nueva concepción y expresión de la revolución con conceptos y lenguajes que vienen de movimientos religiosos, étnicos, campesinos y proletarios también pensantes y actuantes…¨ El que descubre la revolución y participa en ella ¨tras ese acto al que los teólogos llaman ´conversión´, los pedagogos ´concientización´, y el marxismo ´toma de conciencia de clase.´¨ 

La ¨indignación ética¨ de Mardonio Morales
Esa conversión de los teólogos es la que llama indignación ética Mardonio Morales. Ante la realidad de la explotación de los peones en las fincas cafetaleras, la corrupción de las autoridades agrarias,  la represión desatada de las guardias blancas, el ejército, Mardonio llegó a justificar la defensa propia armada: ¨Cuando se da una agresión injustificada se pueden tener acciones de legítima defensa. Yo considero que es posible llegar al momento de decidirse por tomar incluso las armas, cuando la agresión amenaza la vida y no existe otra posibilidad de defensa de la vida.¨[2]  
         Otro tipo de conversión es el que experimentó Mardonio. Educado como religioso y sacerdote con obligación de administrar los sacramentos por ser párroco, tuvo que volver su mirada hacia la realidad social de Chiapas usando las técnicas de la antropología. De esa manera no sólo fue el aprender el tseltal sino sistematizar los conocimientos de la cultura en apuntes y tarjetas. Así en los primeros años de la década de los 70 expone al gobernador la situación laboral de no menos de 30 fincas dando nombres de propietarios, salarios, condiciones de casillaje. Así mismo cuando alega con las autoridades agrarias los rezagos en la solución de solicitudes de dotación o ampliación de tierras de las comunidades de Chilón y Sitalá principalmente es minucioso en la enumeración de expedientes y fechas. Los testimonios recabados en grabadora de los sobrevivientes de la matanza de Wololchán en 1980, la tenacidad en recabar información escrita en zoque de las consecuencias terribles por las erupciones del Chichonal, la averiguación de las circunstancias de la muerte de Manuel Saragos, la continua revisión de la historia para explicar el presente  son ejemplos de una metodología antropológica que aprendió posteriormente a sus años de formación religiosa.



[1] Para el jesuita uruguayo Juan Luis Segundo, el pensamiento teológico pertenece a la ¨superestructura.¨ En el análisis marxista, entonces, la teología se vuelve la superestructura dependiente, es decir, ideología. Segundo, Liberación de la Teología, Lohle, Buenos Aires, 1975:111 citado en Alfredo Sáenz Reseña del libro de  P. Bojorge Teologías deicidas, Madrid, 2000 en http://www.horaciobojorge.org/segundo.html; Ver Hechos 17:22-17,31: el altar del dios desconocido.
[2] Doc I-15 en Un legendario activista de Chipas: Mardonio Morales, Centro INAH Oaxaca/Carteles Editores 2013.

jueves, 12 de junio de 2014

La polarización ideológica en Chiapas


                                      Manuel Esparza

El pasado 7 de mayo se presentó en el Centro de Difusión Universitario Intercultural (CEDUI) de la Universidad Intercultural de Chiapas (UNICH) el libro Un legendario activista de Chiapas: Mardonio Morales. Antecedentes del levantamiento zapatista de 1994. Los comentaristas fueron Mercedes Olivera, Jesús Morales y Alberto Athié. Si bien ese evento fue cinco días después del artero asesinato de un líder zapatista en La Realidad, todavía no se daba la protesta masiva por ese nuevo ataque de la contrainsurgencia contra las bases zapatistas. Esta política nunca la ha abandonado el estado, no importa cuál sea el gobernador desde 1994 se está dando de diversas maneras, desde dividir a las comunidades, en un tiempo, por medio de los ¨tres reyes magos¨: (Andrés Fabregas, Eduardo Robledo Rincón, Eraclio Laco Zepeda) repartiendo bienes y dinero, hasta ahora con cruzadas electoreras contra el hambre. En el ámbito estatal esa política contrainsurgente es facilitada por un gobernador en gira fotográfica continúa y en donde el que gobierna es el presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado.
     La reacción contra el asesinato del maestro José Luis Solís López  se dio hasta el siguiente sábado día 24 acompañada de varios artículos de H. Bellinghausen  criticando entre otros a los intelectuales que han cuestionado aspectos del zapatismo basados en informantes parciales (Vgr. La Jornada, 21, 23, 24 de mayo). El zapatismo no sólo volvía a cobrar bríos sino también la polarización que se da en varios sectores de la sociedad tanto local como fuera de ella. Quedó una vez más delimitado el diálogo que puede haber sobre Chiapas: de un lado la opinión de que el zapatismo está ¨derrotado¨ (M. Estrada Saavedra) al ¨somos ejemplo en México y el mundo,¨(comandante Moisés), o ¨la maravilla del mundo¨ (Marcos al referirse a las bases de la autonomía, citas en H.B.).
         El libro originalmente se iba a presentar en la Universidad de la Tierra-Chiapas, pero este plantel decidió después de varios meses de apalabrado, que mejor ahí no. Por lo visto no fue del gusto de ellos el subtítulo del libro que hace mención a varios hechos y procesos anteriores al levantamiento de 1994. Su negativa sin más explicaciones da lugar a pensar que los de esa Universidad piensan que el movimiento zapatista es inédito y ningún antecedente de los mencionados en la introducción del libro son significativos. Pero también entre otros académicos distintos conocedores de la situación hay reticencia a opinar por miedo a ser mal interpretados, y también por ¨precaución¨ para no ser asociados a corrientes de pensamiento contrarias a las de los gurús de adentro y fuera que se han constituido en los sabedores únicos de lo que sucede.  
         Pero no sólo en el mundo académico se nota esa polarización viva. Ninguno de los párrocos de la diócesis aceptó asistir a la presentación-homenaje de los escritos de un sacerdote difunto a pesar de haber sido invitados personalmente. Todavía  guardan en la memoria la ¨imprudencia¨ de Mardonio Morales de haber declarado que había guerrilla en Chiapas antes de 1994, hecho que negaba el gobierno. Eso lo vieron como una falta de respeto al obispo don Samuel que veía cómo se venía abajo un reconocimiento oficial de la diócesis que estaba esperando de gobernación. Tampoco asistió el obispo Arizmendi confirmando la dificultad inicial que adelantó Alberto Athie cuando se le invitó a  presentar el libro de que al obispo no le iba a gustar su presencia en San Cristóbal. Las desavenencias entre  ellos dos provenían de cuando estuvieron juntos en la Comisión Episcopal de Pastoral Social.
    La polarización de ideologías y ánimos se hace sentir entre los mismos agentes de la pastoral, entre los mismos miembros de una misma orden religiosa como es el caso de los jesuitas y entre éstos y los dominicos. Más significativa  es la división entre los mismos indígenas muy bien reportada recientemente en los artículos mencionados de Bellinghausen en el contexto de la contrainsurgencia. Sólo el caso de Galeano ejemplifica hasta dónde puede llegar el pragmatismo cuando de alianzas se trata que garanticen beneficios, entre otros, aplacar el hambre. En ese caso paradigmático fue una mujer indígena la que macheteó y arrastró al activista pro zapatista.
         Hablando de otro tipo de polarización, mucho escriben los antropólogos sobre la identidad étnica, la religión que permea toda la actividad social comunitaria y le da sentido a su cosmovisión de las realidades que les explican su lugar en el mundo, en la comunidad. Hasta se habla de etnocidio por la evangelización impuesta. San Cristóbal y alrededores es un laboratorio donde cuestionar esas tradicionales afirmaciones. El amplio arcoíris religioso está punteado por el crecimiento exponencial de iglesias protestantes en una población cuya religión colonial se creía imbatible. En pleno centro urbano de San Cristóbal brotan como hongos las casas y templos de las distintas denominaciones cristianas, y también las madrasas, mesquitas y hasta una sinagoga en proceso de construcción.
         La misma postura zapatista recientemente confirmada excluye cualquier otra vía política que no sea la de ellos, se desecha así la vía de ¨las elecciones o las armas¨ (subcomandante Moises, La Jornada, mayo 27, 2014). Mientras tanto el país se tambalea por la violencia, el desempleo, la corrupción, es estrujado como un títere por los grandes intereses internacionales con el agachamiento de los vendepatrias. El pueblo atónito no ve soluciones y tampoco líderes que orienten, no acepta los purismos ideológicos de los intelectuales que ocultan el miedo a la denuncia, no entiende cómo puedan llevarse a cabo en urgente plazo de tiempo las  repetidas idealizaciones por medio de mantras ¨abajo y  a la izquierda¨  ¨mandar obedeciendo.¨
         Volviendo a la presentación del libro, Athié comentando a Mardonio Morales quiso ilustrar el peligro de aferrase a visiones ideológicas de cualquier género que impiden analizar la realidad. Hizo hincapié en la necesidad de interpelar las bases de la ideología de la autoridad religiosa y lo ilustró con el siguiente testimonio. Siendo él Secretario ejecutivo de la Comisión Episcopal de Pastoral Social (1996-1999) fue a Roma y pidió un consejo para llevar a cabo su nombramiento al Cardenal Echegaray entonces Presidente de la Comisión de Justicia y Paz de la Iglesia Católica. ¨Todo lo que se ha hecho hasta este Nuncio (Prigione) ha sido un error¨, le dijo el Cardenal, y explicó: ¨todo lo que se ha logrado es dividir a la Iglesia en una zona de conflicto y eso puede llevar no sólo a incrementar la violencia sino a un cisma en la Iglesia católica. Yo le pido  a Ud. que vaya y busque que los obispos encuentren un espacio para dialogar entre ellos aunque no estén de acuerdo. Esa es mi encomienda. Va a ir un nuevo Nuncio y lleva la misión de entender mejor lo que está pasando y ver cómo acerca a los obispos en la comunión.¨
   Una de las piedras de la discordia episcopal era la institución del diaconado que don Samuel fomentó logrando así una Iglesia autóctona que en opinión de Athié  es una aportación a la Iglesia universal. El nuevo Nuncio Justo Mullor no ocultó que en Roma se veía con suspicacia el diaconado indígena, sin embargo,  mediante el diálogo con don Samuel y el obispo Vera Mullor intuyó que en esa experiencia había algo muy valioso. No opinaban así muchos de la jerarquía que hasta veían en ese diaconado una ¨maniobra para la subversión¨, añadió el comentarista.
   Athié en el puesto que tenía en la Comisión se asesoraba con un grupo de analistas de los medios de comunicación y de otras partes. Fue así como se llegó a saber que los militares en la zona norte estaban preparando a grupos paramilitares y armándolos por un lado, y por otro exacerbando el conflicto en la zona. Dada la inminencia de una posible masacre se propuso como solución que se redactara una carta al Presidente Zedillo para que él como Jefe de las fuerzas militares detuviera el conflicto. Esa carta debía entregarla personalmente el Presidente de la Conferencia Episcopal. Para entonces había dejado de serlo Monseñor Obeso que fue ¨extraordinariamente cercano a don Samuel¨. Mons. Luis Morales fue el sucesor y al que había que convencer de entregar la misiva (el mismo que años después como arzobispo de San Luis Potosí 1999-2012 protegió pederastas). Dado que el  Papa había convocado a un sínodo de obispos, Athié fue a Roma a buscar a Morales. Éste se escabullía dando pretextos para no recibir a Athié. Ya el último día, Athié decidió meterse al comedor del Colegio Mexicano donde estaban los obispos mexicanos. El Cardenal Rivera le preguntó qué hacía ahí. Rivera, dice Athié, no estaba de acuerdo que él estuviera en la Comisión, ¨era un enemigo acérrimo de don Samuel y quería a toda costa  terminar con ese modelo de Iglesia que promovía don Sam.¨ Se le explicó al cardenal con detalle el peligro de una masacre dada la información recabada. El cardenal no le dio importancia y preguntó al obispo Arizmendi que oía la conversación, qué opinaba de lo que decía Athié. Arizmendi respondió igual que lo haría años después Zedillo en su juicio en Estados Unidos por genocidio:
                   - Se trata de conflictos comunitarios, no hay más que eso.
                   - Ya viste, dijo Rivera, hasta luego.
                   - Me voy, respondió Athié, pero quiero decirles que si sucede algo, nosotros también vamos a ser responsables.
   El 22 de diciembre de 1997 tuvo lugar la matanza en Acteal.


esparzacamargo@hotmail.com

martes, 27 de mayo de 2014

Carta a don Francisco Bergoglio


Carta a Don Franciso Bergoglio

Domicilio conocido

Ciudad del Vaticano, Roma.

 

 

Estimado Francisco, dispensa la familiaridad pero como uno de los Antiqui Societatis Jesu Milites me siento aún con restos del espíritu de Iñigo que detestaba títulos y dignidades. La razón de esta misiva es muy simple: invitarte a evitar ser manipulado por el presidente de facto de México que no halla cómo convencer a la jerarquía mexicana para que apoye los proyectos de leyes estructurales acordes al neoliberalismo rampante que sufre el país.

    No necesito darte datos de lo que significan esas reformas para el futuro de este país empobrecido y en vías de serlo más. Ya los obispos te han informado en su reciente vista ad limina de la fallida guerra contra el narcotráfico y de los altos índices de pobreza. Ha sido persistente la política solapadora de las causas de los males, y a esa situación de silencio culpable no pocas veces la Iglesia mexicana ha contribuido al no alzar su voz en contra en espera de recibir beneficios y reformas legales  que la favorezcan. Las muertes iniciales de varias personas en Siria y Venezuela movilizaron interesadamente fuertes reacciones mediáticas contra esos gobiernos, pero en México las muertes arteras de indígenas, los 80,000 muertos y los miles de desaparecidos que ha significado la corrupción a todos los nieves por el tráfico de drogas no ha merecido de la jerarquía más que pronunciamientos no comprometedores.

    Estamos por ver si después de la visita reciente de los obispos mexicanos estos van a responder a Peña Nieto el documento que les envió y en el que espera tibias respuesta a sus reformas estructurales si no es que apoyo decidido. Aquí viene mi sugerencia estimado Francisco. Se dice que el presidente en turno de este país te va a ir a visitar. A nadie se le escapa el significado de esa visita que será ampliamente difundida en imágenes sugerentes. Muchos mexicanos quisiéramos ver que el Vaticano no se preste a esa manipulación. Sugiero que le pospongas la visita al mandatario manipulador hasta después que se haga una consulta popular sobre la reforma energética, no antes. Verás cómo no aceptará, y eso confirmará para qué quiere retratarse contigo.

    Un abrazo,

    Manuel Esparza

esparzacamargo@hotmail.com

viernes, 25 de abril de 2014

Mini diálogos de indignación


Mini diálogos de indignación

 Manuel Esparza

 

Falta de tino Pa
Cuál es la solución a tanto problema, se preguntaban varios amigos reunidos para ver el clásico entre las Chivas y los Pumas. Preocupados por la información sobre las leyes secundarias que se aprobarán seguramente, por la ola de asesinatos y raptos en estados donde antes no eran noticia alarmante, por la incapacidad de la policía para resolver los crímenes, por la falta de empleo y demás males, cada uno proponía soluciones que ya de tan enunciadas continuamente se convertían en expresiones comunes que a nadie convencían.

    El chiquillo de escasos cinco años que estuvo muy atento viendo  el juego, pero oyendo las quejas de los adultos, decidió decirle  después a su papá lo que se le había ocurrido.

-         Es falta de tino Pa,  -dijo tomando la mano de su papá para atravesar la calle rumbo a su casa. Y lo explicó así. Esas gentes que andan matando niños y mamás, lo que les falta es tino. Lo que necesitan es que los lleven a la feria y se pongan a tirarle a los monitos hasta que aprendan a tener puntería.

El papá divertido oyó a su hijo y siguió caminando pensando en lo que había alegado con sus amigos.

-         ¿Te sigo contando? - Oyó que le hablaba su hijo. Mira, es muy sencillo, si esos matones le hubieran atinado  a Ulises, a los diputados, a los policías que ayudan a robar niños, todo se mejoraría, ¿no crees? Lo que sucede es que les falta tino.

El papá no dijo nada, pero sí quedó sorprendido de la claridad con que un niño de esa edad descubría lo que a varios gobiernos les costó tiempo perfeccionar, el cómo deshacerse selectivamente de los cabecillas enemigos. Israel era un ejemplo de asesinatos cobardes contra líderes palestinos. Los drones del negro de la Casa Blanca era otro: golpes exactos en blancos clave a pesar de que matan gente alrededor, pero esto, dicen,  no era intencional. Ya no oyó más, pues su hijo hablaba ahora del juego. Ensimismado elaboraba qué sucedería si en vez de marchas, firmas en las redes, nuevos partidos políticos, el pueblo cansado se decidía actuar pero con tino: desmoronar el edificio de la Suprema sería unas señal inequívoca para que el Judicial se decidiera a ser independiente, otro temblor aunque no fuera del 7 en los edificios de los partidos  y aun en la Cámara de transacciones y pactos donde se aprueba el desvalijamiento nacional debería mandar signos premonitorios a los dueños del capital.

    Sí, no cuesta nada imaginar, se dijo para sí, por lo menos me sirvió para desahogar mi frustración.

 

A cada quién su santo patrono

“Hoy ante tu cruz postrado, ¡Oh, Malverde!, mi señor, te pido misericordia y que alivies mi dolor”, dicen que rezaba un sujeto en la iglesia de mi niñez, San Hipólito. Toda la barriada y hasta de otras venían antes a rezarle a San Judas, el mero chingón de la colonia Guerrero. Ahora me entero que, no sólo en el atrio de ese templo sino en varias partes de la ciudad se venden estatuillas de Jesús Malverde, el patrón de los rateros y de los narcos.

-          ¡Oh My goodness! -dijo la gringuita-, cómo me gustaría para mi tesis estudiar estas nuevas formas de religiosidad mexicana.

(Uta, me dije para mis adentros, pues vas a tener materia, cada rato se aparecen vírgenes donde van a  inundar terrenos para hacer presas, en las estaciones del Metro, en las paredes descascaradas de las casas de los barrios, en las cortezas de los árboles. Nomás cuídate si  vas a Michoacán p´a ver qué te cuentan de sus prácticas religiosas los Templarios. Vas andar ocupada güerita).  

      ¡Ah! se me olvidó añadirle a  la estudiante antes de que subiera al autobús para Morelia que ya teníamos un nuevo santo patrón. No sé cómo lo vaya a llamar el pueblo pues su nombre es largo y no se presta para invocaciones rápidas en caso de eminente peligro de persecución policíaca. Yo le llamo San Súbito, pues así de rápido lo treparon a los altares. No creo que lo bauticen como ¨San Karole¨, menos como ¨San Wojtyła¨ y tampoco ¨San Juan Pablo Segundo.¨  Lo del nombre, pues a ver qué dice el gentío, ¿pero patrón de quiénes?  ¡Bingo! adivinaste,  de los pederastas mi hermano. Éstos, que forman legión más los que se añadan,  invocarán su portentosa intercesión para no ser perseguidos por la justicia, y si de veras es tan milagroso San Súbito, pues para que los siga encubriendo en sus nuevas conquistas infantiles.

   

martes, 4 de marzo de 2014

En el aniversario 75 del INAH


75 años del INAH y 40 del CRO-Oaxaca

Museo de las Culturas de Oaxaca

Febrero 27, 2014

 

Manuel Esparza

 

Con la ocasión de los 75 años de la creación del Instituto Nacional de Antropología e Historia se podría  hacer una revisión general  del desarrollo de la institución y su presencia durante 40 años en Oaxaca. Tarea que sobrepasaría el espacio de este texto, además los aniversarios son para congratularse y mostrar los buenos pasos del homenajeado. Y eso con justa razón dado el largo registro de los grandes logros de tantos investigadores, técnicos y manuales en las tareas específicas del Instituto. Sin embargo, la ocasión puede muy servir para examinar a grandes rasgos cómo ha cambiado el país afectando en diversas maneras los fines del Instituto. Podríamos tomar en concreto la conservación del patrimonio en función de las políticas nacionales. O dicho de otra manera, se antoja reflexionar  si el bienestar general del país cambia en mejoras o se empeora según sea el grado de conservación del patrimonio, entendido éste como el conjunto de todos los bienes naturales necesarios para que un grupo humano  pueda subsistir y desarrollarse social y culturalmente.

     I En la época postrevolucionaria la necesidad de organizar e integrar una nación obligó a tomar las medidas económicas  que se juzgaron pertinentes para hacer un país independiente  y a dar un impulso  hacia un nacionalismo cultural que sacara al pueblo del atraso educativo acumulado y exacerbado por la pérdida  de un millón de mexicanos que causó la Revolución. En el ámbito de la cultura  fue cuando se salió al campo a llevar la educación. En 1921 se fundó la Secretaría de Educación Pública, responsable de velar tanto por la educación como por la cultura de México. Es cuando la UNAM obtiene su autonomía (1929). El vasconcelismo fue la doctrina que movió a miles de brigadistas por todo el territorio llevando libros de la literatura universal. La libertad de expresión se mostró en los muros de numerosos edificios públicos. Orozco en 1941 se burló de la justicia pintando a una mujer no de blanco sino de negro, no con los  ojos vendados sino bien abiertos y que no lleva una balanza en una mano, sino un puñal amenazando a ciudadanos indefensos: toda una sátira de la práctica y la teoría de lo que es la justicia en México. Estos murales en dos tableros están apropiadamente en la sede de la Suprema Corte de Justicia.

         Este periodo comprende la creación del  INAH (1939), del INI (1946), INBA (1946). Ese periodo postrevolucionario no decayó bruscamente, se logró parar la avalancha a media camino: este fue el caso del periodo de Echeverría cuando Gonzalo Aguirre Beltrán en la Subsecretaria de Cultura Popular (1970-74) quedó al frente no sólo del indigenismo oficial  (fue director del INI en 1971-72), del INAH, Cultura Populares, etc. Esta etapa es cuando se nombra a Guillermo Bonfil director del INAH en 1972 y se abren los 8 primeros Centros Regionales, entre ellos este de Oaxaca. Fue el periodo en que se tomó en serio la conservación del patrimonio lográndose que la Procuraduría General de la República destacara a agentes federales para auxiliar al INAH contra del saqueo de los sitios arqueológicos. Las penas por este tipo de delitos llegaron a ser más severas que las de posesión y tráfico de drogas. Todavía este periodo se continuó en la dirección del INAH de Gastón García Cantú. Fue cuando se hizo el Museo de las Intervenciones que afortunadamente ha resistido el embate del siguiente cambio en la política nacional.

 

 

II    Este último cambio siguiente  se  caracterizó por un giro radical hacia el neoliberalismo. Fue la década de los 90s el gran ataque al patrimonio. Se creó con Salinas de Gortari por decreto presidencial  el CNCA, eso fue como consuelo a los intelectuales, varios antropólogos entre ellos, que habían soñado  con una Secretaría de la Cultura desde que había subido a la presidencia José López Portillo. El CNCA en manos de su primer director, una persona respetada en el medio político y cultural Víctor Flores Olea (1988-1992), funcionó permitiendo la autonomía de institutos como el de Bellas Artes y el propio INAH.  Pronto, sin embargo se siguieron cambios drásticos cuando México fue elevado al primer mundo por medio del Tratado de Libre Comercio. Fue en 1992 cuando Salinas hace la contra reforma agraria permitiendo la venta de tierras ejidales afectando ya de esa manera la estructura de las comunidades campesina e indígenas. Ya antes en 1990 se habían privatizado Telmex y la banca y seguirían incontables privatizaciones de empresa públicas[1].

    El 12 de octubre de 1992 fue una fecha de rehabilitación del proyecto neoliberal contra el patrimonio. En los Pinos acompañado de Teresa Franco, Rafael Tovar y de Teresa y Eduardo Matos  además del gabinete y escogidos hombres de negocios, Salinas anunció cómo el patrimonio arqueológico debía servir para generar inversión. Llamó al Instituto ¨el nuevo INAH¨ del que esperaba cooperara en los 12 megaproyectos en los que se invertirían  103,000 millones de pesos. Se le advirtió a los investigadores del INAH que dejaran paso a los más jóvenes, una velada amenaza al sindicato de investigadores que ni dejó sus plazas libres y sí atacó la política de comercialización de los sitios arqueológicos. Se invitó a los empresarios a invertir en tan promisorios negocios.[2] Contra esa tendencia privatizadora de la cultura, Flores Olea apuntó: ¨La historia del siglo XX mexicano ha sido impulsada más por el Estado que por la sociedad (iniciativa privada). El Estado es el creador de las instituciones de la educación, de la cultura, de la economía, de las finanzas. Este papel decisivo no pude desconocerse. El Estado creó la UNAM, el INAH, el INBA, IPN.¨ Admite (Flores Olea) sin embargo ¨un hecho nuevo en la historia cultural de México: el surgimiento de los intelectuales ya no necesariamente vinculados con el Estado sino con núcleos de la iniciativa privada. Ciertamente con algunas inferencias o deducciones muy discutibles. La lógica de ellos sería más o menos la siguiente: puesto que la empresa es libre, nosotros, intelectuales de la empresa libre, somos por definición libres.¨[3] Esto también ha sucedido en Oaxaca con la proliferación de museos  e intervenciones de pintorescos pintores en monumentos históricos incluyendo el Centro histórico[4]. A propósito, esa crítica después ampliada en la polémica entre las revistas Nexus y Vuelta le costó el puesto a Flores Olea quien achaca al Coloquio de Invierno[5] una de las causas  de su despido del CNA: ¨Fue la primera crítica que se hizo en este país, por los intelectuales de más prestigio y otros invitados de fuera, al modelo económico del neoliberalismo…probablemente yo no encajaba en un nuevo diseño político de prolongación a fondo de ese mismo modelo en el campo de la cultura.¨ [6]

         Con Rafael  Tovar al frente del CNCA (1992-2000) en pleno salinato los intereses  del Estado se reflejaron en la pérdida de autonomía del INAH, del INBA y del cuidado por el patrimonio. El escaso presupuesto se canalizó en gran parte en  proyectos  de relumbrón como el Centro de las Artes[7]. Este proyecto sin estudio previo de impacto ambiental pronto agrupó a la comunidad de artistas en contra. Los fines del proyecto  anunciados  mostraban la improvisación y la ambición de los que ya se hacían dueños del desarrollo artístico de México.[8] Se quiso controlar las licencias en monumentos artísticos e históricos, fue cuando Tovar y de Teresa nombró encargado de licencias al arquitecto Juan Urquiaga que fungía tanto en Bellas Artes como en todos los monumentos históricos del país.

         Enrique Florescano a los casi dos años de haber salido del director ya casi pedía la extinción del INAH: ¨En el área del Estado deben quedar las funciones de conservación, catalogación, protección y mantenimiento del patrimonio cultural. Las de investigación en las instituciones académicas, y las de comercialización, financiamiento y promoción social en empresas dedicadas a esos fines  (…). Curiosamente, quienes más se oponen a una verdadera participación del conjunto social en el manejo del patrimonio cultural son los trabajadores de las instituciones culturales transformados hoy en sindicatos y gremios corporativos.¨[9]

         Los embates contra el patrimonio siguieron su curso en 1995 con Ernesto Zedillo ya como Presidente. Se hicieron ocho foros de consulta en  otras tantas ciudades  sobre Política Cultural y Desarrollo como base para elaborar el Plan Nacional de Desarrollo 1995-2000. ¿Cuál fue el resultado de las 232 ponencias? Pues un párrafo de una escasa página de las 173 del Plan Nacional de Desarrollo. De nada sirvió tanta encerrona de un día con gente de toda clase de la cultura. Jorge Alberto Manrique criticó diciendo: ¨el interés del gobierno por la cultura es proporcional a las páginas que se le dedican en el Plan Nacional de Desarrollo.¨ Nada de lo que propuso en Zacatecas  Juan Bañuelos sobre las culturas indígenas.[10] Fue bajo el mismo presidente Zedillo que se  cerró Radio Huayacocotla que llevaba años transmitiendo para la zona indígena de Veracruz, [11] el mismo mandatario que negaría los Acuerdos de San Andrés sobre la cultura indígena.

         Durante 5 años se estuvo elaborando en secreto un proyecto de ley sobre el patrimonio cultural que permitía la privatización de los bienes incluyendo los arqueológicos, se permitía el coleccionismo y la comercialización de sitios y monumentos. Este proyecto presentado por el senador Mauricio Fernández Garza en el Senado no prosperó, pero el mismo Fernández Garza reveló que estuvo siendo asesorado en la elaboración del proyecto por Guillermo Tovar y de Teresa, el que post mortem sería tan alabado como defensor del patrimonio. Casi al año de los ataques de Flores Cano al sindicato, el senador  Mauricio Fernández Garza Presidente de la Comisión de Cultura del Senado dejó bien clara cuál debía ser la subordinación del Institutos como el INAH y el INBA, para empezar dijo era necesario un nuevo ordenamiento legal: ¨Creo que había que eliminar al INAH e INBA casi de  raíz con su ordenamiento constitucional como está y dejarlos en función de una nueva ley, con un reglamento(…) pero se me hace una aberración que Bellas Artes y Antropología tengan en un momento dado un grado casi de autonomía nacional.¨ Para el empresario y coleccionista compulsivo la cultura debe ser de exportación por ser la mayor riqueza nacional ¨aun por encima del petróleo.¨ Y sentenció ¨Si los sindicatos de Bellas Artes y Antropología están en contra de la cultura, deben desaparecer.¨[12]

         De acuerdo con la política salinista continuó Teresa Franco como directora del INAH donde se perpetuaría hasta el siguiente sexenio. Fue cuando quizá por primera vez un director general del INAH es denunciado judicialmente varias veces por los mismos trabajadores. El caso de Teotihuacán es un ejemplo del comercialismo de la zona y la complicidad de las autoridades. Ese era uno de los 12 megaproyectos de Salinas en zonas arqueológicas. Se planeó la Plaza  Jaguares con dinero adjunto de la iniciativa privada. El plan eran 4 edificios para 217 locales comerciales sólo en el área A,  a los que había que añadir más de  200 más en las otras zonas. Aparte de una plaza de artesanías nacionales y extranjeras se planeaba un Mall con boutiques, joyerías, restaurantes, bares, hotel de cinco estrellas. Pronto las uniones de comerciantes tradicionales protestaron y junto con el sindicato de académicos del INAH exigieron públicamente que se transparentaran las licencias y términos de las concesiones que Teresa Franco y el arqueólogo Matos director del proyecto habían dado.[13]

         En el CNCA se sucedieron ya en pleno neoliberalismo panista gente como Sari Bermúdez (2000-2006), Sergio Vela (2006-2009) y Consuelo Sáizar Guerrero (2009-20012).  De esos 12 años de panismo Hugo Gutiérrez Vela dice: ¨Los seis  años de Fox y los 6 de Calderón fueron un golpe fuerte a la cultura (...) como no querían hacer nada más y como sus secretarios o como se llamen del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, la señora Bermúdez y la señora Záizar no tenían la posibilidad de tomar iniciativas, lo que sucedió es que disfrazaron su ineptitud, su odio a la cultura, con un gigantismo totalmente desafortunado: obras faraónicas que al final no sirvieron para nada.¨[14] Ejemplos de esas obras la Mega Biblioteca y la Torre del Bicentenario. En palabras del mismo Hugo Gutiérrez Vega: ¨Durante 12 años el odio conservador a la cultura y al Estado laico rompió con esa tradición postrevolucionaria, y se disfrazó con un gigantismo absurdo y contraproducente.¨[15]

 

        

III      El modelo capitalista es expansionista, no respeta a la gente y sus tradicionales habitats, las selvas son para la ganadería y para proyectos turísticos; los pueblos habitados, ríos, y mantos freáticos son contaminados por incontables concesiones  mineras a cielo abierto. Para tener una idea de la depredación, el doctor Exequiel Ezcurra considera que para elaborar un Centenario de oro se necesita extraer 132 toneladas de roca, consumir 100 mil litros de agua dulce y 450 litros de combustible. Con esa agua se puede abastecer a 200 familias al día. Eso es lo que ha aprobado la SEMARNAT a una compañía canadiense en Los Cordones, Baja California: luz verde para extraer en 10 años 40 toneladas de oro a cielo abierto.[16]

         Se atenta directamente contra la existencia misma de los portadores de cultura como lo dijo dramáticamente el raramuri Juan Gardea de Norogachi en un foro en la Universidad  Iberoamericana  en 1993, un año antes de que el mismo Salinas nos llevara al primer mundo y los zapatistas le declararan la guerra: ¨El bosque ya no es nuestro. Las tierras son de los caciques. Nosotros los rarámuris nos hemos remontado a la sierra. Los animales también nos los ha quitado el cacique. Nos están acabando día a día, al último no seremos más que un recuerdo en la historia.¨[17] Eso fue en 1993 Año Internacional de los Derechos de los Pueblos Indígenas.

          Con Peña Nieto inaugurando una nueva fase más agresiva de modelo neoliberal no se puede esperar más que la privatización de los bienes nacionales que quedan, y para coadyuvar con su política vuelven al área cultural los mismos personajes de antaño: Rafael Tovar en el CNCA y Teresa Franco en el INAH.

 

IV   Ya más en concreto a lo que atañe a este Centro Regional del INAH, el impulso  postrevolucionario culminó con la ley de 1972 sobre el patrimonio que permitió en primer lugar poner fin a la destrucción de la ciudad en manos del Colegio de Arquitectos. Durante más de una década nadie se pudo recibir en Arquitectura pues los intereses de los constructores domiciliados en la Secretaria de Obras Públicas no aceptaban competencia alguna. El patrimonio construido de la ciudad y de muchos de los monumentos religiosos del estado fue posible su conservación por la acción decidida de la entonces Secretaria del Patrimonio Nacional. Fue cuando se restauraron ruinas que el Estado no había podido conservar: Santo Domingo, San Francisco, el Zócalo, Siete Príncipes, Santa Catarina, la catedral, etc.

         A partir de 1973 principio de este Centro Regional fue el fin del centralismo en varias ramas de la investigación y conservación. No volvieron a salir al centro del país piezas arqueológicas y se empezó hacer responsables a los municipios para que ellos conservaran su propio patrimonio arqueológico que salía de las siempre presentes llamadas denuncias de hallazgos. Desde la Dirección central de los Centros Regionales se aprobó que en este Centro Regional se hicieran publicaciones y se administran las ganancias localmente.  La idea era que cada centro fuera en la provincia un foco de investigación y difusión regional. Fue el comienzo de uno de los proyectos más importantes que se han llevado desde la provincia en todo el Instituto, el de los museos comunitarios. Este proyecto nació en Oaxaca y es ahora solicitado en varios partes de América Latina.

         La apertura de un Centro Regional ayudó a facilitar el intercambio y colaboración de investigadores nacionales y especialmente extranjeros. De particular relevancia ha sido la investigación arqueológica llevada a cabo por investigadores extranjeros que vinieron a revitalizar la arqueología donde había quedado con Caso, Bernal y Acosta. Oaxaca obtiene también primeros lugares en la investigación arqueológica de la antigüedad de la agricultura en Mesoamérica, y en estudios de superficie, de tal manera que a nivel mundial Oaxaca ha sido la más extensamente estudiada, más que Mesopotamia y Egipto. Esta convivencia académica de investigadores extranjeros  y nacionales ha beneficiado a Oaxaca con la apertura de nuevos sitios arqueológicos abiertos al público, conocimiento de las culturas loacales, y muy especialmente en la formación de nuevos investigadores mexicanos en varias disciplinas.

         Ese primer entusiasmo por la conservación que se había logrado con la nueva ley (1972) se reflejaba en muchos de los trabajadores que se empezaron a convertir en denunciantes voluntarios de obras clandestinas en la ciudad. La entrega de arquitectos oaxaqueños en la tarea muchas veces ingrata de  la conservación de la ciudad debe ser reconocida ampliamente. Aquí un recordatorio agradecido al Arq. Octavio flores Aguillón, al Arq. Vicente Nísino Lloret ambos ya difuntos y al Arq. Enrique Núñez Banuet. En Administración siempre estarán presentes en este Centro de trabajo la labor inicial de Lorenzo Gamio, Félix Villanueva  y muy especialmente de Jaime López. En las zonas arqueológicas fue el tiempo de vigilantes volantes entre ellos  Rafael Vásquez en todo el estado especialmente en la región de la Cañada, Carlos Jiménez en la de Etla,  Álvaro Arturo Ramírez de la región de Ocotlán - Zimatlán, Juan Bigueño en Yengola, Arturo Antonio Canseco en Monte Albán, Zenón Ramírez como auxiliar en la solución de problemas con personas de la ciudad y en varios conflictos en los municipios. La enumeración de colaboradores del  sólo se refiere a los primeros  años de la fundación del Centro Regional en Oaxaca y aun así está incompleta. Innumerables denuncias se hicieron por saqueos, y hubo detenciones carcelarias. Ese periodo se caracterizó por el apoyo directo de las autoridades centrales a los planes y proyectos de los centros regionales. Guillermo Bonfil tenía un valedor en la SEP, Aguirre Beltrán, y eso facilitaba el aumento de presupuesto al Instituto y los trámites a nivel de ministros[18].

     Pero así como se podía llegar a ciertas alturas encomiables también venían los descensos y la atrofia burocrática dados los vaivenes del régimen del que ya se ha hecho mención. El sindicato de investigadores cobró fuerza donde antes prácticamente pasaba inadvertido. Con una mentalidad estaliniana de sus dirigentes defendiendo al trabajador tuviera o no razón se dejó de avanzar substancialmente en la investigación y difusión de  resultados. El hecho de que el 90 % de los investigadores son titulares C, pero donde no hacen mayoría en el Sistema Nacional de Investigadores revela cómo el burocratismos les ha permitido ser parte de las comisiones mixtas, entre ellas la de evaluación al grado de que un escalafón de evaluación mal hecho y que favorece precisamente las horas asiento lleva prácticamente 30 años sin mayores cambios. Todos los logros sindicales económicos, la mayoría desaparecerán con la jubilación,  no han podido obtener la homologación  con IPN y los sueldos siguen estancados[19].

         Con Enrique Flores Cano el INAH sufrió la pérdida de independencia del Instituto. El director volvió a ser como en los viejos tiempos de Caso[20], y Bernal[21], un puesto para ascender políticamente, no para arriesgarse a antagonizar al gobierno. Flores Cano como comienzo reemplazó al personal de la Dirección del Jurídico del INAH, se fueron los que conocían de la ley de la materia y de sus deficiencias, todo un bastión de apoyo en la provincia en las intervenciones para parar obras o denunciar saqueos. Pronto se acumularon tres jurisprudencias que debilitaron substancialmente la fuerza de la Ley de 1972. Tan exitosa había sido antes la asesoría jurídica que su titular el Dr. Geertz Manero fue llevado a la PGR donde se creó para él por primera vez el puesto de Oficial Mayor.[22] Fue el comienzo  de una burocracia del Instituto  asentada en el D. F. que no volvió salir a visitar los centros regionales, situación por cierto que se ha prolongado durante los últimos 30 años. Las publicaciones del Instituto sólo se pueden conseguir en el D. F. en un país de 110 millones de habitantes. La institución que ha crecido enormemente en la parte administrativa y muy poco en la de investigación, al grado que de aquellos  mil y tantos trabajadores del Instituto al principio de la administración de Bonfil, hay cerca de 8 mil ahora contando a los innumerables ¨eventuales¨ es decir, los que no tienen plaza. Los con plaza son un indicio del envejecimiento de la institución dado el poco interés del gobierno por la cultura en general: este año sólo hay 10 investigadores con 5 años cumplidos de antigüedad, en cambio con cuarenta años cumplidos somos 38[23].

         El vacío de poder para hacer cumplir la ley localmente, ha llevado  a una parálisis en el proceso de denuncias y de licencias oportunas.  Y la pérdida de presencia del Instituto. Eso necesariamente tuvo que reflejarse en el deterioro de la ciudad y la falta de apoyos para tener una imagen digna ante la sociedad con la consiguiente pérdida de autoridad. El caso paradigmático fue la crisis del 2005 en adelante por la remodelación del zócalo, donde la responsabilidad del INAH brilló por su ausencia o mejor dicho por su anuencia. Hubo periodos en que varios de los conflictos con autoridades y particulares, lo mismo el otorgar  licencias de construcción  debían remitirse a México. Con frecuencia la misma PGR relegó las denuncias judiciales que se hacían aquí al centro de todo poder en este país de más  de 110 millones de habitantes. Ese centralismo afectó a muchos proyectos y convenios que se hacían en la provincia, es el caso de frustrado museo de Zaachila  cuando era posible que retornaran los hallazgos arqueológicos que ni exhibición estaban en el Museo Nacional. Fue tanta la falta de presencia del INAH en los centros de trabajo que otras autoridades tomaron la responsabilidad de dar licencias, este fue el caso de la  SEDUE cuando se  quitó el ciprés de la catedral de Guadalajara en 1992[24], lo mismo sucedió en Oaxaca ante la total ausencia de la entonces directora regional del INAH. Fue cuando Ramírez Vásquez  de la Secretaría de Obras Públicas (1976-1982), vino a darle la razón al  gobernador  y al presidente municipal de Oaxaca que habían empezado a ¨remodelar¨ la Alameda y a nivelar la gran plancha.

         Los directores regionales no quisieron  comprometer su puesto al ver que no había prácticamente comunicación ni apoyo desde las oficinas centrales, no al menos en los niveles  que se tuvieron digamos de 1972 a 1980s. Al respecto, no se puede menos de traer a la memoria el ejemplo de Manuel Gamio cuando fue nombrado subsecretario de Educación en el gobierno del General Calles, eran entonces tales los fraudes del Secretario José Puig Casaurar que Gamio los denunció. El conflicto se resolvió previsiblemente destituyendo a Gamio quien en sus propias palabras nos da ejemplo de cómo se puede uno indignar contra funcionarios que atentan contra el patrimonio:  ¨Sin vanidad ni fingimiento de ningún género considero que el cese que acabo de recibir y cuya expedición provoqué insistoriamente (sic), es para mí un acontecimiento altamente satisfactorio, porque gracias a él creo contribuir hasta donde me alcanza mi modesta esfera, a la rectificación de valores morales en la senda de la administración pública que me tocó cruzar, y a la dignificación de mis compañeros que viven como yo vivía fatalmente sujetos por la tradición al grillete del servilismo oficial. Con esta declaración pongo punto final al incidente de mi separación del gobierno del Gral. Plutarco Elías Calles.¨[25]

 

         A manera de explicación, este escrito ha querido reflejar el profundo cariño a la institución en la que he trabajado durante 40 años convencido que los fines por los que fue  creado el INAH son dignos de respeto y dedicación, que la responsabilidad en el trabajo es la única manera de justificar el sueldo y las prestaciones, que el cuidado del legado cultural del país está por encima de cualquier interés sindical o de las autoridades cuando éste sea en detrimento de la conservación y fomento de la herencia cultural de México. Poco se contribuiría a la merecida celebración del  aniversario si no hiciera también un examen crítico de la institución. 



[1] El reciente informe  ¿Ayudó el TLCAN a México? del Centro de Investigación Económica y Política (CEPR) en Washington califica el tratado ¨de un terrible error¨ como lo muestra cualquiera de los indicadores económicos y sociales. Por ejemplo, en el campo 5 millones de agricultores fueron desplazados entre 1991 y 2007. El PIB fue la mitad del promedio de américa Latina, el índice de pobreza permaneció igual que hace 20 años: 52. 3 %, La Jornada, febrero 13, 2014.
[2] Proceso, noviembre 30, 1992, No 839, Nota de Gerardo Ochoa Sandy.
[3] Proceso, diciembre 21, 1992, Nota de Gerardo Ochoa Sandy.
[4] Rodolfo Morales acusó al INAH de destruir el patrimonio porque no le permitía remodelar sus propiedades a su gusto, Proceso, enero 6, 1995, No. 950; el protagonismo de Francisco Toledo ver blog http://dialogosdesoledad.blogspot.com/.
[5] El Coloquio de Invierno fue organizado en febrero de 1992, por la Universidad Nacional Autónoma de México, la revista Nexos y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes para discutir los grandes cambios de nuestro tiempo.
[6]   Proceso, junio 12, 1995, No. 971. En el ámbito nacional el debate por los libros de texto de historia para alumnos de primaria siendo Secretario de Educación Zedillo en 1992 dio como resultado que se destruyeran  6 millones de libros gratuitos ya impresos. El caso ilustra ese papel libre e interesado de intelectuales al servicio del mejor postor, ver http://www.felipemoreno.com/zedilloylosintelectuales.htm.
[7] Este proyecto terminó por acabar la industria cinematográfica mexicana que si bien venía en declive había llegado  a producir 125 películas al año  y dar trabajo a 8 mil familias que de alguna manera estaban relacionadas con la industria, Proceso, marzo 29,1993, No. 856, Nota de Héctor Rivera. Para abril de  ese año habían sido liquidados 300 trabajadores, Proceso No. 909. El CNCA prefirió a la extranjera Cinemark que a propietarios mexicanos y además sin licitar el contrato para manejar los autocinemas durante 15 años prorrogables a 30, Proceso abril 25, 1994, nota de Héctor Rivera. El Arquitecto que diseñó ese proyecto Ricardo Legorreta fue el mismo que diseñó la plazuela del Carmen Alto aquí en Oaxaca donde tejían y vendían artesanías mujeres triques quienes fueron  desplazadas a la banqueta atrás de Santo Domingo; esa plazuela ahora es el sitio de artesanías hippies y de piratería de discos. 
[8] Ver Proceso Nos. 861, 871, 862, 872 del año 1993.
[9]  Proceso,  enero 3, 1992, No. 896, Nota de Gerardo Ochoa Sandy.
[10] Proceso, junio 5, 1995 No. 970.
[11] Proceso, mayo 15, 1995 No. 967.
[12] Proceso, octubre 9, 1995, No. 988, Nota de Roberto Ponce.
[13] Proceso, Nos. 916, 920. ¨A Teresa Franco se le demandó sindicalmente igual que a Matos y a Tovar y de Teresa y al mismo Salinas de Gortari por las plazas comerciales que comenzaron a desplantar en la zona arqueológica de Teotihuacán: el Corso, Gamio y Jaguares. Estas se localizaban en tres puntos distintos de la zona arqueológica, el Corso detrás de la Pirámide de la Luna, Jaguares en el predio de la Ventilla y Gamio en las inmediaciones del viejo museo de Gamio en las inmediaciones de la pirámide del Sol. La demanda se debe haber presentado en 1996 o 97. Luego yo en lo personal demande a Teresa por los permisos que dio para las llamadas cumbres Tajín, que después se hicieron extensivas a Sergio Raúl Arroyo, quien siguió con la costumbre de Teresa de dejar en manos de los gobernadores el uso de las zonas, arqueológicas, que también lo hizo con Chichen Itza con Pavarotti y por lo cual también la demandé¨ Enrique Echenique, comunicación personal, 02/18/2014. Ver para el seguimiento del caso, Proceso, enero 30. 1995, No. 952; febrero 13, 1995, No. 954; febrero 27, 1995, No. 956.
[14] La Jornada, Nota de Mónica Mateos-Vega, enero 17, 2014. Sáizar en el último año de Calderón en 2012 estuvo aceptando documentación por obras no cumplidas, el monto fue de 350 millones 478 mil pesos, La Jornada, febrero 23, 2014, Nota de Roberto Garduño.
[15] Ibid.
[16] Ivan Restrepo, ¨Intereses inconfesables¨ febrero 3, 2014: http://www.jornada.unam.mx/archivo_opinion/autor/front/41#sthash.0ISH5Hd0.dpuf. En 2012 en México se produjeron  96.5 toneladas de oro  con un valor de 68 mil 254 millones de pesos, pero según la Ley Federal de Derechos los titulares de concesiones pagan 5, 91 pesos semestralmente por hectárea durante los dos primeros años de concesión. La Jornada, febrero 9, 2014. Nota de Juan Carlos Miranda. Adolfo Gilly en el Seminario Internacional Derecho, Democracia y Pueblos en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM al hablar del despojo moderno causado por la globalización dijo que ¨rompe el ancestral vínculo del ser humano con la naturaleza.¨ Y explicó que la privatización de cuantos bienes se ha hecho arrasa con la biodiversidad, las creaciones intelectuales los saberes locales, los códigos genéticos, los espacios radioeléctricos y aéreos, la energía eólica, e inclusive con la sangre y órganos humanos, la biosfera entera y recursos necesarios para la vida, como el agua y las semillas. No es la maldad de nadie, es una fuerza abstracta cósica que conduce finalmente a la violencia bélica y al exterminio de pueblos, cultura, bosques, ríos, lagos, glaciares y cultivos milenarios, todos consustanciales a la vida humana.¨ La Jornada, febrero 13, 2014, Nota de Emir Olivares.
 
 
[17] Proceso marzo 8, 1993, Nota de Pablo Latapi.
[18] El CNCA creado por un decreto presidencial carece totalmente de la interlocución que se exige con los diversos ministerios que tiene que ver con los fines del INAH. La enumeración de colaboradores sólo se refiere a los primeros 10 años de la fundación del Centro Regional en Oaxaca y aun así está incompleta.
[19] En 1993 el INAH fue descubierto en su decadencia. La Contraloría General de la Federación detectó más de 10 cargos contra el Secretario de Administración, el Coordinador de  Difusión y a varios administrativos por desvío de partidas presupuestales, abuso de atribuciones, nepotismo, enriquecimiento ilícito durante la administración del Director General Arqueólogo Roberto García Moll. Algunas cantidades dudosamente comprobadas ascendían a  varios cientos de millones de pesos. Aquí en Oaxaca, durante ese mismo periodo de tiempo, la Contraloría Interna del INAH selló las oficinas del Director Regional y despidió a coludidos con agentes de turismo que escamoteaban millones de viejos pesos de  las entradas de Monte Albán y otros sitios.
[20] Alfonso Caso fue Jefe de exploraciones en la zona arqueológica de Monte Albán (1931-1943); Director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (1939-1944); Rector de la Universidad Nacional Autónoma de México. Candidato a la presidencia por parte del PRI en vez de Adolfo Ruíz Cortinez. Sin embargo los últimos veintidós años de su vida los pasó como Director del Instituto Nacional Indigenista, donde dio a su hijo contratos para construir  los nuevos centros coordinadores que se abrían. Como nostalgia de un pasado porfiriano a don Alfonso cuando llegaba con su chofer a las oficinas de Av. Revolución salía a recibirlo el personal del INI y cuando partía se volvía repetir el ceremonial acompañándolo hasta que partía el carro, (Ver Salomón Nahamad, ¨Una experiencia indigenista: 20 años de lucha desde investigador hasta la cárcel en defensa de los indios de México,¨ mecanoscrito,1988, pp.32). A la toma de posesión de Luis Echeverría no fue invitado ya, las malas lenguas dicen que eso le ocasionó la muerte.
[21] Ignacio Bernal  y García Pimentel fue entre otros sub Director del INAH (1958-1968), Director del INAH (68-71), Director del Museo Nacional de Antropología e Historia (1962-1968 y 1970-1977). Siendo Sub director el INAH Bernal trabajó en Yagul y Monte Albán. De estas dos zonas sacó piedras rodadas para construir la alberca y la barda de sus casa de campo en San Felipe del  Agua. Eso causó que fuera denunciado ante la PGR mucho antes que se iniciara el Centro Regional del INAH en Oaxaca en febrero de 1973. Bernal venía a fines de año trayendo secretarias de México para que atendieran la casa como sirvientas, en esos fines de año solía invitar a altos funcionarios, entre otros, de la embajada americana. Ya en tiempo de Bonfil como director General  en los 70s. y siendo Bernal Director del Museo de Antropología, en una recepción en la embajada, el embajador americano agradeció a Bonfil  ¨por las piezas arqueológicas que le había obsequiado el Dr. Bernal.¨ (comunicación personal de varios directivos del INAH en 1973). Esa afición por disponer  de piezas arqueológicas se había mostrado antes, cuando vendió otras para subvencionar los gastos de su boda a la Sra. Troumotille, una coleccionista de la ciudad de México como ella misma relató al que esto subscribe. Del círculo familiar de Bernal es Pedro Aspe quien siendo Secretario de Hacienda durante el periodo de Salinas, fue cuando se hicieron la mayoría de las privatizaciones, una de ellas la que FONATUR pretendió al querer vender  el ex convento de Santa Catarina de Oaxaca.
[22] Para algunos efectos de esa administración en Oaxaca, ver ¨La basura de la administración anterior,¨ en Patrimonio y derechos Indígenas: Tareas pendientes, Oaxaca, Carteles Editores, 2001: 14-15.

[23] Reconocimientos de Estímulos por Antigüedad 2013‏, INAH. Son sólo 167 investigadores con derecho a estímulo por tener de 5 a 55 años de antigüedad.

[24] Proceso noviembre 2, 1992 No.835, Nota de Felipe Cobián.
[25] Excelsior 8 de junio de 1925, citado en Nahamad op. cit. p. 7, ver n. 20.