Carta
abierta al presidente Andrés Manuel López Obrador
Manuel
Esparza*
24/11/2024
El que esto subscribe
aclara que no es de la oposición, sino un seguidor del
régimen, que ha participado en varios mítines de cuando Ud. era candidato a la presidencia,
que tiene amistad con uno de sus hermanos y ser familiar político de varios que
colaboran muy cercanamente con su gobierno. No obstante, soy un crítico del
acontecer político y no estoy de acuerdo con varios de los proyectos y acciones
que se llevan a cabo.
Dentro del énfasis
humanitario que caracteriza su gobierno, hallo, sin embargo, una sería
discrepancia en política exterior cuando se trata de la posición de México en
el conflicto entre Palestina y el régimen sionista de Israel. Ud. tiene razón
en invocar la doctrina Estrada como un ideal, la no intervención en asuntos
internos de otros países, la insistencia en dialogar las diferencias evitando
la confrontación armada. En efecto, la naturaleza humana nos ha dotado de
defensas para no exterminarnos mutuamente, una de ellas y que toda persona
normal en el mundo experimenta es la empatía, ese impuso inmediato que se
siente, por ejemplo, cuando se ve a un adulto patear a un infante, saber que
hay violadores de niñas de meses, etc. Sencillamente no se puede uno quedar
neutral, sin hacer nada. De la misma manera, la historia condenará siempre a
aquellos que prefieren ser neutrales ante masacres masivas de seres humanos
pretextando ser pragmatistas, dejándose llevar del miedo a no antagonizar al
poderoso para evitar daños mayores: excusas falsas de vergonzosa complicidad.
Ud. Sr. Presidente ha
dicho que prefiere ser neutro en ese genocidio que se incrementa a diario ante
la mirada incrédula de todos. Uno sólo puede sospechar que en el fondo se temen
las represalias de los verdaderos poderes detrás de las marionetas llamadas
Biden o Netanyahu. Triste término de un exitoso periodo que ha gozado México
por fin después de muchas décadas, y con el heredado peso que tendrá que cargar
su sucesora.
Ud. dice que el pueblo es
el que manda, pues haga una consulta nacional y apóyese en lo que en nuestro
nombre decidamos. Sr. Presidente, culmine Ud. su gran logro encabezando en este
continente el movimiento de rechazo al genocidio mandando llamar al embajador y
rompiendo relaciones con Israel.
Si Señor, tenga por
seguro que es para mí una profunda satisfacción apoyar el cambio que se ha
logrado en el país y reconocer su incansable liderazgo, mi cooperación es esta
crítica que espero la vea constructiva.
Atentamente,
Manuel Esparza
(Antropólogo).
esparzacamargo@hotmail.com